Almond es uno de los más aclamados creadores de aquella generación de artistas británicos conocidos como Young British Artists, que revolucionaron el panorama artístico internacional a mediados de los años 90. A diferencia de algunos de sus compañeros de generación, su obra huye de las extravagancias y la provocación gratuita, para desarrollar un complejo discurso de gran fuerza emocional.
Práctica compleja
Ha trabajado con el cine, la fotografía, la transmisión en vivo vía satélite, la escultura y el dibujo para establecer una práctica ricamente compleja, emotiva y flexible que se centra en el tiempo y la historia, así como en las huellas de la industrialización.
Una de sus aportaciones más incisivas desde el ámbito de la fotografía es su análisis y recuperación del tiempo fotográfico como una experiencia visual radical del movimiento y de la detención, resuelto en una duración suspendida como representación de la quietud.
Almond traza por primera vez en España un recorrido sistemático por su obra a través de una cincuentena de obras de mediano y gran formato –distribuidas en las dos plantas de la sala– entre pintura, escultura, fotografía y video instalación.
El núcleo de esta muestra es All Thing Pass (2012), una instalación articulada en cinco pantallas de proyección y rodada recientemente en Chand Baori (India), el mayor aljibe escalonado del mundo. Rodada tanto en la estación seca como durante los monzones, tiene como sintonía una pieza de música clásica hindú, estructurada en ragas y escrita para determinados días y estaciones.
Ex profeso
Además, para la exposición el artista ha realizado ex profeso una gran pintura mural titulada Black Chance 605470614539409352 (2013), así como otras piezas sorprendentes, como Rauschenberg’s Mantle Piece (2012), una escultura de cristal (radiómetro) cuyo mecanismo interno se activa y se pone en movimiento a través de la incidencia cambiante de la luz ambiente. Estas obras se pueden ver distribuidas en la nave que ocupa la planta baja de la sala de exposiciones.
A lo largo de las galerías de la planta primera de la sala, la muestra incluye un significativo recorrido a través de la selección de fotografías perteneciente a su serie más conocida, Fullmoon, en la que el artista se enfrenta a paisajes de todo el mundo a la luz de la luna llena, mediante largas exposiciones, entre 15 y 60 minutos, que otorgan una extraña e inquietante luminosidad.