Escrita en el siglo XVII, la vigencia de esta obra es total en la sociedad contemporánea. El humor negro, lo grotesco y el feísmo son elementos claves de una historia que presenta a la audiencia unos personajes fácilmente reconocibles. El galán intachable, la princesa casadera, el rey caprichoso, el escudero fiel,… todos ellos resultan ser una burla del orden establecido, capaces de llevar al espectador a reflexionar sobre sus convicciones.

Juan Dolores Caballero es el encargado de llevar a las tablas la obra de Diego Velázquez del Puerco. Licenciado en Arte Dramático, se ha encargado de rescatar numerosos textos clásicos del Siglo de Oro que habían sido olvidados. Ha sido director de 30 obras teatrales, seis espectáculos de danza y dos más de ópera. A lo largo de su carrera ha sido galardonado con numerosos premios, entre los que se cuentan el Premio al Mejor Espectáculo y el Premio a Mejor Dirección por La cárcel de Sevilla, obtenido en el año 2003.