Primera película báltica en llegar a la recta final de los premios de la Academia de Hollywood, además de a los Óscar como mejor película de habla no inglesa, Mandarinas -cuya première mundial se produjo en el Festival de Cine de Varsovia- también fue nominada a los Globos de Oro y logró el Satellite Award de la International Press Academy a la mejor película extranjera.
Año 1992. En pleno conflicto provocado por la independencia de la provincia de Abjasia, en Georgia, Ivo, un hombre de origen estonio, decide quedarse en Georgia para ayudar a su amigo Margus en la recolección de la cosecha anual de mandarinas. Toma esa decisión a diferencia de la inmensa mayoría de sus compatriotas que se han marchado ya o han decidido hacerlo.
En ese difícil escenario, Ivo encuentra una mañana a las puertas de su casa a un par de soldados heridos. Pertenecen a bandos opuestos en la contienda. Pero, con la ayuda de Margus, decide acogerlos y cuidar de ellos hasta su recuperación.
Historia sobre gente sin fronteras, sobre seres humanos de nacionalidades y creencias religiosas distintas; epopeya sobre enemigos que se convierten en aliados… En definitiva, un relato cargado de humanismo, sencillo en sus formas y profundo en su fondo, que ha cautivado a públicos muy diversos y, entre ellos, a los miembros del jurado de los Premios Gaudí.