El festival se inaugura el 1 de abril con la compañía canadiense Cas Public, que presenta el espectáculo de danza contemporánea Suites curieuses (Suites curiosas), una sorprendente y plástica versión de Caperucita Roja para niños a partir de cuatro años. Genuina es también la interpretación que hace del personaje la compañía Ultramarinos de Lucas con Little Red Riding Hood, una pieza de teatro de objetos en español y en inglés.
Para bebés
En el apartado dedicado a los bebés destacan los espectáculos Nest, una delicada puesta en escena de la compañía belga Theater De Spiegel; Flots, tout ce qui brille voit (Olas, todo lo que brilla puede ver), una pieza de teatro de objetos y música a cargo de los canadienses de Le Théâtre des Confettis; y Pour la petite histoire (Para la pequeña historia), una obra pensada para los más pequeños por la compañía francesa Sémaphore.
Teatralia también recordará a dos figuras clave de la literatura universal en el año en el que se celebra el 400 aniversario de su muerte: Miguel de Cervantes y William Shakespeare. Para ello se han programado espectáculos que reinterpretan para el público joven la historia de Don Quijote (Aventuras de Don Quijote, de El Retablo, y Quijote, el vértigo de Sancho, de Markeliñe), Romeo y Julieta o Macbeth (Algo de un tal Shakespeare, de Los Tristes Tigres).
Dos talleres para adultos y una experiencia sensorial a cargo de la compañía Teatro de los Sentidos completan las más de tres semanas de programación, que contarán con un total de 20 espectáculos nacionales e internacionales.
Funciones para todos
El festival contará con funciones para familias (fines de semana y festivos) y funciones escolares (en días y horario lectivos). El programa de la campaña escolar se difunde por los más de 3.500 centros educativos madrileños (enseñanzas no universitarias) con 48 funciones. Este año Teatralia llegará a 32 municipios de la región.
Además habrá sesiones con intérprete de lengua de signos para personas sordas y funciones con audiodescripción para personas con discapacidad intelectual y también llegará a niños que no puedan acudir a los teatros, como los pequeños hospitalizados en el Hospital Infantil Niño Jesús o los menores que viven con las madres que cumplen condena en centros penitenciarios.