Mary Beard es una de las figuras intelectuales europeas más influyentes de la actualidad. El jurado ha valorado especialmente su capacidad para «integrar el legado del mundo clásico en nuestra experiencia del presente. Se destaca así la herencia de la tradición clásica y se reconoce a las Humanidades como fuente inspiradora de la reflexión social y política contemporánea. La obra de Beard demuestra un extraordinario talento para convertir un saber especializado en conocimiento accesible y relevante para el gran público».
Winifred Mary Beard (Much Wenlock, Reino Unido, 1955), catedrática de Clásicas en la Universidad de Cambridge y miembro del Newnham College, es una de las especialistas sobre la Antigüedad más relevantes y una de las intelectuales británicas más influyentes.
Feminista militante
Tras licenciarse en Artes en el Newnham College de Cambridge, se doctoró en 1982 con una tesis sobre The state religion in the late Roman Republic: a study based on the works of Cicero. Al comprobar que muchos de sus compañeros de universidad cuestionaban el potencial académico de las mujeres, Beard se sintió aún más motivada para seguir adelante, adoptando un punto de vista feminista que ha sido, según ha declarado, muy importante en su vida, pues, según sus palabras “de verdad no puedo comprender lo que sería ser una mujer sin ser una feminista”.
Beard impartió docencia en el King’s College de Londres (1979-1983) y en 1984 regresó a Cambridge, donde, en 2004, obtuvo la cátedra de Clásicas. Profesora visitante en la Universidad de Berkeley (2008), las seis conferencias Sather que impartió se publicaron en 2014 bajo el título Laughter in Ancient Rome: On Joking, Tickling and Cracking Up (Sather Classical Lectures). Mary Beard es editora jefe de clásicos del The Times Literary Supplement desde 1992 y escribe el blog A Don’s Life que se publica en The Times.
Autora de obras de referencia como El triunfo romano (2008) y Pompeya (2009), ningún otro clasicista actual ha sabido combinar, en palabras del profesor de la Universidad de Saint Andrews, Stephen Halliwell, “con tanta eficacia la excelencia profesional en el estudio de las culturas de la Antigua Grecia y Roma con una habilidad excepcional para comunicar el interés y la importancia de tal investigación a una audiencia amplia. Al hacer eso, Beard ha desarrollado una voz y un estilo únicos que caracterizan todo su trabajo –más de una docena de libros, trabajo periodístico, documentales televisivos y un blog de larga trayectoria y gran notoriedad–”.
Gran divulgadora
Ha escrito y presentado series documentales para televisión: Pompeii: Life and Death in a Roman Town (2010), Meet the Romans with Mary Beard (2012) y Pompeii: New Secrets Revealed with Mary Beard (2016). Colabora asimismo regularmente en radio. Entre sus principales obras están, además de las ya citadas, Rome in the Late Republic (1985, 1999), Pagan Priests: Religion and Power in the Ancient World (1990), The Parthenon (2002), Confronting the Classics: Traditions, Adventures and Innovations (2013) y SPQR: A History of Ancient Rome (2016).
Elegida miembro de la Sociedad de Anticuarios (2005), de la British Academy en 2010 y miembro de la Academia Americana de las Artes y las Ciencias en 2011, en 2013 recibió la Orden del Imperio Británico y en la actualidad es catedrática de Literatura Antigua de la Real Academia de las Artes. En 2008 recibió el Wolfson History Prize (Reino Unido) por Pompeya y en 2013 el Premio de la Classical Association (Reino Unido) por su “contribución fundamental al conocimiento público de las Clásicas”. Está en posesión de la Medalla Bodley (2016).
El jurado de este Premio –convocado por la Fundación Princesa de Asturias– ha estado presidido por Carmen Iglesias e integrado por Paz Battaner, Marta Elvira Rojo, Isabel Gómez-Acebo, Mauro Guillén, Óscar Loureda, Sami Naïr, José Manuel Otero Novas, Joseph Pérez, Rafael Puyol, Isaac Querub, Amelia Valcárcel, Fernando Vallespín y Juan Vázquez García (secretario).
La candidatura de Beard fue propuesta por el Grupo de Investigación Deméter de la Universidad de Oviedo.
Sobre el premio
Los Premios Princesa de Asturias están destinados, según los Estatutos de la Fundación, a galardonar “la labor científica, técnica, cultural, social y humanitaria realizada por personas, instituciones, grupo de personas o de instituciones en el ámbito internacional”. Conforme a estos principios, el de Ciencias Sociales se concede a aquellos “cuya labor creadora o de investigación represente una contribución relevante en beneficio de la humanidad en los campos de la historia, el derecho, la lingüística, la pedagogía, la ciencia política, la psicología, la sociología, la ética, la filosofía, la geografía, la economía, la demografía y la antropología, incluyendo las disciplinas correspondientes a cada uno de dichos ámbitos”.
En esta edición concurrían un total de 37 candidaturas, procedentes de Alemania, Argentina, Canadá, Croacia, Estados Unidos, Francia, Hungría, Irlanda, Italia, México, Portugal, Reino Unido, Rusia y España.
Este ha sido el tercero de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden este año, en que cumplen su trigésimo sexta edición. Anteriormente fueron otorgados el de las Artes a la actriz y directora de escena Núria Espert y el de Comunicación y Humanidades, al fotoperiodista estadounidense James Nachtwey. En las próximas semanas se fallarán los correspondientes a (por orden) Investigación Científica y Técnica, Deportes, Letras y Cooperación Internacional. El Premio Princesa de Asturias de la Concordia se fallará el próximo mes de septiembre.
Cada uno de estos galardones está dotado con una escultura de Joan Miró, la cantidad en metálico de 50.000 euros, un diploma y una insignia. Los galardones serán entregados en otoño en Oviedo en un acto presidido por los Reyes.