Ahora, aspectos como que el planteamiento original contemplaba un solo volumen en lugar de los dos actuales, que el edificio iba a estar situado justo en frente de la sede del Banco Santander, que sus líneas y formas se parecían más a un trapecio que a un óvalo, o que en la primera fase del proyecto se había proyectado un gran puente por encima de la carretera para conectar los Jardines de Pereda con el Centro Botín, quedan al descubierto en el libro Centro Botín, Santander, una obra de más de 200 páginas realizada gracias a materiales inéditos que han sido catalogados y clasificados por la Fundación Renzo Piano, los mismos que desvelan todas las variables que se estudiaron desde que surgió la idea del proyecto hasta que se materializó.
Lia Piano, directora de la Fundación Renzo Piano e hija del arquitecto y Premio Pritzker, ha coordinado este volumen que se encuentra ya disponible en la tienda del Centro Botín. Planos, bocetos, maquetas, secciones con diferentes puntos de vistas, fotografías y apuntes manuscritos del propio Piano configuran una especie de diario visual de fácil lectura y con un diseño muy cuidado.
La publicación desvela que Renzo Piano fue el único nombre que se contempló para ejecutar el proyecto por su especial sensibilidad hacia la luz y su capacidad para integrar zonas portuarias en espacios urbanos. También incluye una transcripción fiel y completa de la entrevista concedida por el arquitecto italiano en febrero de 2018, destinada a los archivos de la Fundación Renzo Piano.
Además de permitir al lector conocer de qué manera se gestó la primera obra del gran arquitecto en España, el volumen tiene indudable valor documental. Un sinfín de fotografías ilustran cómo una zona degradada de la ciudad se convirtió paulatinamente en un lugar para el encuentro y el disfrute de todos en torno a las artes.