Como los sucesores de Sísifo, los topos hacen rodar sus piedras cuesta arriba ofreciendo su visión de la historia de la humanidad. Juguetones, codiciosos y algunas veces agresivos, exploran las razones más profundas de su existencia y descubren su interés por el arte y el ritual.
Los espectadores pueden ver a estas criaturas subterráneas viviendo, comiendo, durmiendo, muriendo, trabajando, dando a luz, copulando, divirtiéndose y formando una banda de rock… En este espectáculo contundente y explosivo, su creador evita contar historias y se concentra en la esencia de su trabajo: explorar los materiales y el poder de la música, la construcción de espacios y la creación de la luz que baña a sus personajes.
Philipe Quesne ha diseñado escenografías para teatro, ópera y exposiciones. En 2003 fundó Vivarium Studio Company con quien ha desarrollado su particular estilo y, desde 2014, codirige el Centro Dramático Nacional Nanterre-Amandiers en Francia.
Quesne busca lo maravilloso, lo pequeño y las experiencias extremas de nuestra vida cotidiana, junto a la relación entre la humanidad y la naturaleza. De niño ya lo hacía cuando recolectaba insectos y ahora trabaja y estudia pequeñas comunidades bajo su microscopio y utiliza la escenografía como un ecosistema en el que sumerge a sus actores. Además de su trabajo más escénico, como el que presenta en Naves Matadero, crea performances e intervenciones en espacios públicos que dialogan con la pieza teatral.
En Madrid, además de presentar esta pieza, Quesne y sus topos intervienen en Veranos de la Villa en el programa Cuando el río suena… y en Verbena animal.
– La nuit des taupes puede verse los días 18, 19 y 20 de julio (Nave 11. 21.00 h). Las funciones del 19 y el 20 de julio serán accesibles y contarán con un paseo escénico previo para personas con discapacidad visual e intelectual. El paseo escénico se llevará a cabo 75 minutos antes de la función. El acceso se realizará por la puerta principal del teatro, por orden de llegada y hasta completar el aforo máximo 20 personas.