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La singularidad de esta muestra, centrada en la vertiente más arquitectónica de su obra, solamente ha sido posible a partir del descubrimiento de las legiones de bocetos y croquizaciones inéditas que el artista guardaba celosamente. A partir de estos bocetos se han podido perfilar las diversas etapas hasta reconstruir su método creativo, donde destaca el intenso uso de papeles translúcidos y de trazos de grafito. El protagonismo de sus composiciones reside en la línea. Un trazo dotado de una componente poética heredera de la «línea que sueña» de Paul Klee, una cita que Palazuelo solía repetir y que inspira el título de la exposición.
Pablo Palazuelo junto a los óleos ‘Accord Noir’ (1958) e ‘Imagination du Temps’ I (1958). Galapagar, c. 1958. Fotografía: Enrique Palazuelo. © Fundación Pablo Palazuelo.
Esta selección se acompaña con distintas publicaciones relacionadas con el ámbito arquitectónico escogidas de su biblioteca personal. A lo largo de esta muestra se desgrana la selección de estos proyectos y actuaciones, íntimamente relacionados con el periodo de indagación formal en el que se veía inmerso, por lo que se trata de exponer las intrincadas conexiones que vinculan entre sí el conjunto de su obra, transitando por distintos soportes y escalas que le proporcionan su coherencia, hasta confeccionar una narración gráfica que ordena el legado de su producción, entendida como un proyecto vital completo.
La exposición ha sido comisariada por Teresa Raventós-Viñas y Gonzalo Sotelo-Calvillo, este último es el autor de la tesis doctoral Análisis de la geometría de Pablo Palazuelo desde la visión del arquitecto que, defendida en la Universidad Politécnica de Madrid en 2015, sirve de base teórica para este recorrido expositivo estructurado en nueve ámbitos, que abarcan desde la etapa formativa y las primeras influencias del artista hasta sus diseños de mobiliario para el entorno doméstico o las grandes obras concebidas para la escala urbana, pasando por otras en las que el énfasis recae en referencias a laberintos, tránsitos, cerramientos, límites y vidrieras. De esta manera, la muestra incluye más de 130 obras sobre papel, lienzo, maquetas, esculturas y publicaciones.
En palabras de Sotelo-Calvillo, el método creativo de Palazuelo «guarda una asombrosa similitud con la metodología del proyecto arquitectónico, atravesando una serie de etapas gráficas que le conducían progresivamente desde los bocetos iniciales hasta los planos más definidos de materialización». Este particular método le llevó, por ejemplo, a usar papeles de croquis, cuya transparencia le permitía superponer diferentes bocetos mientras desarrollaba sus obras, un sistema que aprendió en su formación inicial como arquitecto en la City of Oxford School of Arts and Crafts, donde estudió entre 1933 y 1936.
Línea | Arquitectura
Pablo Palazuelo. La línea como sueño de arquitectura ha sido posible gracias, fundamentalmente, a la Fundación Pablo Palazuelo, propietaria y custodia del grueso de las obras que la conforman, pero también a las Colecciones ICO, el Museo Reina Sofía y el Museo Thyssen-Bornemisza, que con sus préstamos han contribuido a enriquecer el discurso expositivo.
Esta muestra se inscribe en la línea que el Museo ICO viene desarrollando desde hace algunos años, en la que se profundiza en facetas poco conocidas de artistas presentes en sus colecciones y de la que ya formaron parte Jaume Plensa. Ópera, teatro y amigos (2005), Susana Solano. Proyectos (2007) o Guillermo Pérez Villalta. Artífice (2008).
