La directora del museo, Anna Casas, ha afirmado que esta nueva exposición, que permanecerá abierta al público hasta octubre de 2009, “reúne piezas que gozan de un gran reconocimiento internacional, como la escultura de barro conocida como La Chupícuaro.

Impresionante colección

El coleccionista suizo Jean-Paul Barbier-Mueller ha explicado que su familia, once años después de la creación del museo barcelonés, ha llevado a cabo una política activa de adquisiciones que ha permitido doblar el volumen de la colección, reforzando algunos conjuntos, como el dedicado a la civilización olmeca, que por ser la más antigua y de gran influencia sobre las posteriores, es conocida como la cultura «madre» de Mesoamérica.

Precisamente, entre las veinte piezas inéditas que se exhiben en Barcelona destacan varias olmecas como una gran cabeza con tocado de chamán y boca de jaguar, un bol funerario, un elemento ritual de jade que podría ser un colgante (1200-800 a. C.), una representación monolítica del dios Jaguar y una figurilla de un jugador de pelota (1500-200 a. C). También se expone por primera vez una figura que representa un bebé faliforme que, según Casas, podría ser una evocación a la fecundidad.

En el área dedicada a la cultura maya, destacan otras tres obras que se exhiben por primera vez al público: un personaje, una figura con forma de herramienta y un vaso funerario con asa con forma de perro y, junto a ellas, se erige una gran estela maya, procedente de Guatemala, relacionada con la divinidad Kukulkan o Quetzalcoalt (600-900).

Posteriormente, a París

Tras su exhibición en el museo, esta exposición se podrá contemplar a partir de octubre de 2009 en el prestigioso Museo del Quay Branly de París, que cuenta con colecciones de arte americano, pero también de Asia, África y Oceanía, lo que, según Barbier, «será un acontecimiento importante para la proyección cultural de Barcelona».

Esta colección permanecerá en la capital catalana hasta el 2015, después de que el Ayuntamiento de Barcelona y el coleccionista suizo renovaran hace dos años el contrato que habían firmado en 1997.