La ya ex presidenta de la Academia de Cine ha agradecido las palabras de apoyo de Rodríguez Zapatero al anunciar su nombramiento. "Creo en su proyecto y dejo abierta esta casa al creador", ha asegurado. González-Sinde ha destacado que cree en la Cultura "como generadora del bienestar". También aseguró llegar con "un programa ilusionado" en el que trabajará "con sosiego pero sin pausa, siempre en defensa de la Cultura y de los creadores".

César Antonio Molina ha bromeado con que en vez de una cartera le "entregaba una claqueta". Numerosos amigos de la nueva ministra relacionados con el cine han asistido a la toma de posesión, entre ellos el productor Elías Querejeta, la actriz Pilar Bardem y los directores José Luis Borau y Gerardo Vera. Tampoco le han fallado apoyos desde la moda: estaban los diseñadores Modesto Lomba y Ana Locking, también el editor Fernando Lara, la presidenta de la Biblioteca Nacional, Milagros Corral, y el director del Museo Reina Sofía, Borja Villel. También estuvieron junto a González-Sinde las ministras Bibiana Aído y Cristina Garmendia y la secretaria de Organización del PSOE, Leyre Pajín.

Biografía

Guionista y directora de cine y actual presidenta de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, González-Sinde estudió Filología Clásica en la Universidad Complutense de Madrid, cuenta con un máster de Guión Cinematográfico y amplió su formación en Los Ángeles en el American Film Institute. Ha sido la guionista de numerosas series de televisión junto a Alberto Macías, así como de multitud de películas, trabajos que le han valido varios reconocimientos, entre ellos dos Premios Goya, el primero en 1997 al mejor guión original por La buena estrella, de Ricardo Franco.

Su debut como directora, y uno de sus trabajos más premiados, fue la película La suerte dormida (2003), protagonizada por Adriana Ozores y Premio Goya a la mejor dirección novel en 2003. Repetiría en las labores de dirección en uno de los cortos de Madrid 11M: Todos íbamos en ese tren (2004).

El relevo en Cultura forma parte de una amplia remodelación del Gobierno, para -en palabras del presidente- "cambiar el ritmo" y "dar un nuevo impulso" ante la situación económica, que incluye como principales novedades la incorporación de Trinidad Jiménez (hasta ahora secretaria de Estado para Iberoamérica) como ministra de Sanidad y Asuntos Sociales y la llegada de Ángel Gabilondo (rector de la Universidad Autónoma de Madrid) a Educación. A ellos se suman la hasta ahora titular de Administraciones Públicas, Elena Salgado, que pasa a ser vicepresidenta económica; el presidente andaluz, Manuel Chaves, que ocupará la vicepresidencia tercera y el Ministerio de Cooperación Territorial, y el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, que se hará cargo de Fomento.

Persona más idónea y defensa del Ministerio

"La proyección mundial de la cultura española a través de nuestros creadores -explicó el presidente del Gobierno en su comparecencia antes los medios de comunicación para explicar la remodelación del Ejecutivo- está en plena extensión. Las posibilidades de transmisión e intercambio cultural son infinitamente superiores a las de cualquier época anterior. Ello crea enormes posibilidades para una cultura tan potente como la nuestra pero, a la vez, plantea nuevos problemas de regulación, de armonización de intereses vinculados a la red y a la propiedad intelectual. Ello es especialmente relevante en todo lo que refiere a la creación audiovisual. Ángeles González-Sinde, como creadora y como persona representativa y reconocida por todos los sectores del cine español, es especialmente idónea para dirigir esta tarea".

En respuesta a la pregunta de un periodista, que puso en duda la utilidad del Ministerio de Cultura cuando la mayor parte de las competencias en  este campo están en manos de las comunidades autónomas, Rodríguez Zapatero afirmó tajante: "Si algo es España en el mundo es cultura, es su cultura. Un país que tiene tal caudal cultural, que se nos admira y se nos reconoce de manera muy especial por la cultura, ha de tener la cultura al máximo nivel en la política del Gobierno. Un país que tiene y que dependen del Gobierno central los grandes museos estatales, cuya gestión es un espejo ante el mundo, tiene que tener la máxima responsabilidad gubernamental. Un país que hace de la cultura uno de sus caminos más innovadores y de futuro para ese nuevo modelo de crecimiento económico, porque tiene una gran aportación a nuestro PIB y porque hay una gran demanda en el mundo de cultura española, tiene que situarla al máximo nivel. ¿Cómo nos van a considerar a ese nivel si nuestro interlocutor en temas de cultura ante el mundo no es un ministro o nuestro interlocutor con las Comunidades Autónomas que tienen competencias en Cultura? Tiene que ser alguien que se siente en el Consejo de Ministros". 

Ángeles González-Sinde estaba desde diciembre de 2006 al frente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, puesto en el que relevó a la actriz Mercedes Sampietro. La nueva ministra es hija del fundador y primer presidente de la Academia, José María González-Sinde, y su hermano también se dedica al mundo del cine.

Menos de dos años

En cuanto a César Antonio Molina (La Coruña, 1952), fue nombrado ministro de Cultura el 9 de julio de 2007. Licenciado en Derecho y en Ciencias de la Información, se doctoró cum laude con un trabajo de investigación sobre la prensa literaria española, publicado en tres volúmenes. Fue profesor de Teoría y crítica literaria en la Universidad Complutense y lo ha sido, en los últimos ocho años, de Humanidades y Periodismo en la Universidad Carlos III. También fue durante varios años coordinador de los cursos de humanidades de la Universidad de Verano de El Escorial.

De 1985 a 1996 trabajó en Cambio 16 y Diario 16, donde llegó a ser director adjunto y responsable de las páginas de cultura y espectáculos, así como de los suplementos Culturas y Libros. En 1996 se incorporó al Círculo de Bellas Artes como director-gerente. En mayo de 2004 fue nombrado director del Instituto Cervantes.