La muestra Invitados de honor. Exposición conmemorativa del 75 aniversario del MNAC reunirá 80 obras. Además de Picasso, Dalí, Rusiñol y Miró, el museo acogerá obras de Jaume Huguet, Bernat Martorell, Damià Forment, Marià Fortuny y Ramon Casas.

Una segunda exposición, La princesa sabia. Las pinturas de Santa Caterina de la Seu d’Urgell, reunirá el conjunto completo de frescos que decoraban la capilla dedicada a esta santa en la catedral de la Seu d’Urgell (Lérida), y que actualmente se encuentran dispersos entre el Museu Episcopal de Vic, la Fundación Abegg de Berna (Suiza) y el propio MNAC.

Entre las actividades destinadas a conmemorar este 75 aniversario también se incluye la digitalización de todas las obras de la colección, que estarán disponibles en Internet. Además, a principios de 2010 finalizarán las obras de restauración de las cornisas de la fachada, que se iniciaron a comienzos de este año.

Todas las artes

El MNAC comprende todas las artes (escultura, pintura, artes del objeto, dibujos, grabados, carteles, colección de fotografía y colección de numismática) y tiene la misión de explicar un discurso global del arte catalán, desde el románico hasta mediados del siglo XX. 

En el caso de las colecciones de románico y de gótico, este discurso viene marcado por la procedencia catalana de gran parte de las piezas, a pesar de que, concretamente en el gótico, se hace una comparación con el arte de otras procedencias.

En cuanto a la colección de renacimiento y barroco, las obras que la integran conducen hacia un discurso más internacional, de la mano de grandes pintores, como, por ejemplo, El Greco, Zurbarán, Velázquez, Cranach, Rubens, etc.

Año 1934

Los fondos del MNAC pertenecientes al arte de finales del siglo XIX y las primeras décadas del siglo XX vuelven a estar constituidos mayoritariamente por ejemplos de artistas catalanes, que se articulan en un discurso que explica el modernismo, el noucentisme y las vanguardias, siempre teniendo en cuenta todas las artes.

Las raíces del museo se tienen que buscar en la labor de recuperación y conservación del patrimonio que, en Cataluña, empezó en la segunda mitad del siglo XIX y culminó en 1934 con la inauguración del Museu d’Art de Catalunya, instalado en el Palau Nacional de Montjuïc.