En toda su obra está muy presente la memoria, la infancia, la privacidad, la melancolía, el tiempo, el fetichismo, la emoción… para ordenar los objetos como pedazos de memoria, una memoria barroca que plasma la realidad tal y como la ve, con sus límites imprecisos, sus formas que salen y entran, los objetos de primer plano intrascendentes, los escorzos y las posturas violentas.
Obra inquietante
Calvo acude a menudo a temas religiosos, escenas de santos, mitológicas, el retrato, tanto el individual como el de grupo, resuelve las obras bajo estéticas diferentes: el tenebrismo y el eclecticismo, el choque violento de la luz contra la sombra. El fondo queda en penumbra, negro, o desaparece por el brillo dorado, mientras que la escena queda en primer plano sumado a una estética decorativa efectista y teatral. Lo cotidiano y los detalles vibran en una misma superficie y por fin la exaltación, sus formas son complicadas, opulentas y respiran espiritualidad.
En esta ocasión, la artista crea un proyecto especialmente concebido para el espacio de la galería. Divide el espacio en dos, con una gran cortina negra, que oculta al espectador (voyeur) las piezas centrales de la exposición. En la primera parte de la sala se colocan una serie de dibujos, dorados y fotografías intervenidas de pequeño formato. Dibujos e imágenes que Calvo acompaña de un título, texto, que los complementa y explica; con una fuerte carga de ironía y humor.
Tras la cortina
En el fondo de la sala, tras pasar la cortina, nos encontramos las piezas centrales de la exposición. Bajo el título de San Paulo, cuatro fotografías, montadas en cajas de luz, fotografías antiguas recuperadas y transformadas por la artista. Se nos presenta una serie de imágenes con un contenido erótico y sexual, pero en un segundo nivel de lectura una particular y compleja interpretación iconográfica. Se disponen también en esta sala, tres piezas compuestas por objetos ensamblados sobre un fondo dorado, que complementan y refuerzan la lectura de las fotografías, otorgan al espacio un cierto tono sacro.
Santiago de Compostela. Carmen Calvo. Galería SCQ.
Del 10 de diciembre de 2009 al 14 de enero de 2010.