En un principio, se iban a entregar unos 9.500 negativos pero un hallazgo reciente de una caja oxidada detrás de unos productos de limpieza ha permitido elevar la donación hasta los 12.000 negativos. Esos últimos trabajos estaban relacionados con los bombardeos de Reus e incluso fotografías familiares. Sin embargo, quedan sin entregar los trabajos industriales y publicitarios realizados por Centellés tras regresar del exilio, que están siendo documentados y catalogados por sus hijos.

Testigo excepcional

Agustí Centelles fue un testigo excepcional de la Guerra Civil española, que cubrió tanto en primera línea como en la retaguardia. Durante el conflicto estuvo permanentemente en activo: los bombardeos de Lleida, la destrucción de Belchite, la evacuación de heridos, la asistencia a la infancia en la retaguardia, las trincheras, los combatientes… Centelles trabajó desde el bando republicano y su significación política le obligó al exilio en Francia en 1939, donde pasó varios meses en el campo de concentración de Bram, cuyo terrible día a día documentó con su cámara.

Cuando en 1939 emprendió el camino del exilio llevaba consigo una gran maleta de piel. En ella viajaban su Leica y miles de negativos, su archivo personal. En 1944, a su vuelta del exilio, confió el material a una familia campesina de Carcasona que le había acogida en su casa.

Lo hallado en una maleta

En 1946, tras pasar dos años en Reus, regresó a Barcelona y se presentó ante las autoridades. Fue juzgado y quedó en libertad condicional. Su pasado político le impidió dedicarse de nuevo al fotoperiodismo por lo que se decantó por la fotografía industrial y publicitaria.

A la muerte del dictador, viajó hasta el país vecino y recuperó sus negativos. Fue entonces cuando comenzó su reconocimiento público. Las imágenes volvieron a exponerse y Centelles se convirtió en un símbolo de los fotoperiodistas de guerra. En 1984, el Ministerio de Cultura le concedió el Premio Nacional de Fotografía.

Los dos herederos de Centelles han explicado que han depositado el legado de su padre «en el mejor sitio posible, hemos buscado la máxima difusión para su obra» y han anunciado que harán una «gran exposición en Nueva York en 2010 o 2011».