Las celebraciones comenzaron en mayo de 2009, con la inauguración de la Casa Museo de Giorgione, un museo donde la enigmática figura del artista y el contexto cultural que le rodeaba encuentran una expresión concreta en las obras, los lugares y las reconstrucciones arquitectónicas. Ahora, la Casa Museo Giorgione Castelfranco Veneto recoge en su ciudad natal, por primera vez, el genio, la grandeza y el encanto de sus primeras obras.
Una nueva y original instalación –de larga duración, ya que se mantendrá abierta hasta abril del 2010– en la que se pueden admirar las obras maestras de la primera fase de la carrera de Giorgione, junto a la de los artistas con los que estuvo en contacto durante su corta vida, entre ellos Giovanni Bellini, Lorenzo Costa, Carpaccio, Perugino, Sebastiano del Piombo, Palma el Viejo, Leonardo, Rafael y Tiziano.
Colaboración internacional
Muchos de los principales museos nacionales e internacionales han contribuido en este homenaje al gran maestro, con la cesión de obras, como el Museo del Hermitage de San Petersburgo, la Galería Uffizi de Florencia, la Pinacoteca Ambrosiana de Milán, el Louvre de París y la Galería Nacional de Londres.
La exposición representa una ocasión única para que los visitantes puedan acercarse al enigma, el misterio y el mito que rodea a un artista del que han quedado muy pocas evidencias sobre su vida: los documentos que contienen su biografía se pueden contar con una mano e incluso estos se limitan a la fase final de su vida, a la que la peste llevó a un final prematuro en 1510.
Castelfranco Veneto. Giorgione. Casa Museo de Giorgione.
Hasta el 11 de abril de 2010