Los artistas prepararán sus proyectos en las instalaciones del CDC, en periodos cuya duración está en torno a los dos meses, variando en función de las necesidades de cada proyecto, hasta un máximo de tres meses.
La viceconsejera de Turismo y Cultura, Carmen González, acompañada del director general de Artes Escénicas, Música y Audiovisual, Amado Giménez, del gerente de los Teatros del Canal, Jorge Culla, y del coordinador del CDC, Marcial Rodríguez, han visitado los primeros ensayos de algunas de las compañías que han comenzado ya su residencia.
La alta calidad de las propuestas presentadas ha conllevado que se seleccionaran 32 participantes, un número que supera los de convocatorias anteriores. A la hora de valorar a los trabajos presentados se tuvo en cuenta, obviamente, la calidad, además de otros criterios como la originalidad o la potencial proyección de los mismos entre otros.
Si bien en esta convocatoria predomina la danza contemporánea, entre los seleccionados se encuentran todos los estilos: danza clásica, neoclásica, flamenco, danzas urbanas o danza para niños. Cabe destacar que entre las propuestas se han recibido numerosas que abogan por la interdisciplinariedad y la fusión de las diferentes formas de danza con el circo, el teatro, la performance, el audiovisual e, incluso, el largometraje.
Compañías veteranas y jóvenes promesas
Entre los seleccionados hay compañías ya asentadas y de prestigio, y otras que comienzan y a las que el CDC quiere dar la oportunidad de preparar su primer proyecto. Además, gracias a la colaboración con el Certamen Coreográfico Internacional de Danza Contemporánea de Madrid [1], se ofrece una residencia temporal a uno de sus ganadores como parte de su premio.
Todas las formaciones ofrecen, a cambio de esta oportunidad, una contraprestación artística o sociocultural que se decide en función de las actividades que programa el CDC, siempre para la promoción de la danza o la creación de nuevos públicos (encuentros con los alumnos de los conservatorios de danza, con escolares, alguna celebración especial, etc.).
Las compañías seleccionadas en anteriores convocatorias han nutrido, desde la primera de ellas, una gran parte de las programaciones de teatros y festivales de Madrid, España y, de manera creciente, de Europa. Por citar solo unos ejemplos, Antonio Ruz, Sharon Fridman, Manuel Rodríguez, Dani Pannullo, Stocos, Dani Abreu o Aracaladanza son algunas de las que han llevado sus proyectos creados en el CDC fuera de nuestras fronteras.
El principal objetivo del Centro Danza Canal es favorecer el desarrollo de la danza, dinamizando la actividad y la creación, y ofreciendo el entorno de trabajo más adecuado a los bailarines. Para ello, cuenta con el proyecto de residencias temporales para compañías de danza profesionales, gracias al cual se ha convertido, en sólo tres años y medio, en uno de los centros de creación coreográfica más importante de Europa.
Dispone de nueve estudios de ensayo de diferentes tamaños, distribuidos en cinco plantas, y sus superficies oscilan entre 72 y 238 metros cuadrados. Todos están climatizados y acústicamente aislados, con barras de ensayo móviles y otros elementos auxiliares, además de piano. Están dotados con mesas de sonido y cámaras de grabación interna, así como con otros elementos audiovisuales. La infraestructura básica se complementa con instalaciones auxiliares tales como los seis camerinos o las aulas teóricas.
Más allá de un lugar de ensayo, el CDC es también un lugar de interrelación entre coreógrafos y compañías, cuya actividad nunca cesa. Allí comparten espacios y experiencias las compañías seleccionadas para una residencia temporal, con las programadas en los escenarios de los Teatros del Canal y con el Ballet Víctor Ullate – Comunidad de Madrid, que es la compañía residente del CDC.