La iglesia, cedida al Estado como ampliación del Museo de Cerámica, ha tenido distintos usos; liceo, casino, escuela, sastrería, almacén de vinos y residencia. Con esta ampliación, el Museo de Cerámica gana 353,41 metros cuadrados de superficie expositiva, lo que ha supuesto una inversión de 382.108 euros, realizada por el Ministerio en el período 2004-2012.
Las colecciones de azulejería talaverana expuestas en ella completan el discurso del Museo de Cerámica Ruiz de Luna centrado en la exhibición de lozas de las principales series cerámicas talaveranas desde el siglo XVI al XX.
En el Liceo se exhiben paneles y placas de azulejería que pertenecían a retablos, arrimaderos y revestimientos de estancias. Gran parte de estas piezas seleccionadas para su exhibición en el nuevo edificio han sido restauradas por el Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE), lo que permite hoy disfrutar por ejemplo del revestimiento del Peinador de Velada, de los arrimaderos del Caserío de Vicuña, la fachada de la fábrica, el Panel de la Anunciación o el Frontal de la Crucifixión.