De formación autodidacta, Ceesepe comenzó su carrera artística en los años 70 como dibujante de cómics como El Víbora, Madriz, Star o La Luna. Durante los 80 vivió a caballo entre Madrid y Barcelona, y entró en contacto con otros artistas del momento como Nazario, Mariscal, El Hortelano, García-Alix y Ouka Leele.
Ceesepe era, sobre todo, pintor, y de hecho esa fue su principal actividad desde principios de los 80. Trasladaba a la pintura su mundo de temática desenfadada en composiciones exuberantes y centrales donde incorporaba elementos gráficos de la ilustración. Sus pinturas tienen referencias iconográficas constantes a Toulouse Lautrec, Modigliani, Chagall y al pop británico, en especial a Peter Blake y Peter Philips, donde no importaban los recursos empleados para plasmar una idea. Sus obras están resueltas con una gama de color sobria, aplicada sin empastes donde es frecuente el uso del azul y el rojo, recortándose los planos nítidamente entre sí.
También dejó su impronta pop en la cartelería publicitaria. Entre sus afiches más conocidos sobresalen los realizados para las películas de Pedro Almodovar Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón (1980) y La ley del deseo (1987), o sus diseños para el Festival Internacional de Teatro de Madrid (1992), Festival Internacional de Jazz – Viajazz 2004– de Collado Villalba, el Festival La Mar de Músicas de Cartagena (2009) o el primer cartel para la reinauguración del Circo Price de Madrid (2007).
Entre sus publicaciones más célebres se encuentran Barcelona by night, París-Madrid, Libro blanco, El arte de morir y El difícil arte de la mentira. En 2011 le fue concedida la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.
El ministro de Cultura y Deporte ha manifestado su pesar por la muerte del ilustrador y pintor madrileño: «Su desaparición significa perder a uno de los referentes de la cultura más innovadora de la España democrática», ha declarado José Guirao, para quien, si tuviera que destacar algún rasgo de su personalidad, sería «su profundo sentido de la amistad, del que tuve el lujo de disfrutar».
Guirao ha recordado que Ceesepe fue un artista fundamental dentro de la contracultura española de finales de los 70 y 80: «Su obra se convirtió de alguna forma en el ‘logotipo’ de la ciudad de Madrid en los 80. Fue un artista total en la primera época desplegando su trabajo en el cómic, la ilustración, la pintura, los fanzines y portadas de discos…, que se centró en los 90 solo en la pintura».
Ceesepe fue galardonado en 2011 con la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes que otorga el Ministerio de Cultura.