El Centro de Estudios Dalinianos (CED) de la Fundación Dalí dio a conocer en 2014 los criterios en materia de escultura y obra tridimensional. Esta herramienta permite identificar las distintas tipologías en que puede clasificarse su obra escultórica. Cada tipología está asociada a unos estándares para distinguir las diferencias entre una obra original, una múltiple o una reproducción.
En la obra escultórica de Dalí, “original” no es solo sinónimo de auténtico, sino de una obra que se ajusta a unos criterios muy precisos en relación a su proceso de producción. A diferencia de la pintura, la obra escultórica puede reproducirse a través de procesos mecánicos, lo que provoca que su catalogación requiera unas pautas muy específicas.
En el tramo estudiado, que abarca los años treinta, se han identificado 34 obras originales únicas, un capítulo rico por su singularidad, diversidad y calidad, lo que permite definir este ámbito de la creación escultórica daliniana como una de las máximas expresiones de su creación surrealista.
Esta producción comprende una amplia gama de categorías: esculturas, esculturas-objeto, esculturas involuntarias, objetos surrealistas, objetos de funcionamiento simbólico, esculturas intervenidas y también instalaciones. Estas obras se conservan, además de en la Fundación Dalí, en colecciones como las del Art Institute of Chicago, el MoMA el Museo Reina Sofía o el Centre Pompidou. Dentro del conjunto destacan algunas obras prácticamente inéditas o muy poco conocidas.
En soporte digital
La implementación de este catálogo en soporte digital ha sido compleja debido a la propia complejidad conceptual de la obra escultórica y tridimensional de Dalí. La estructura de la web se ha ido adaptando a la investigación académica y se han ido incorporando características y funcionalidades según se iban produciendo nuevos descubrimientos. El usuario puede visualizar la obra con una imagen de gran formato y puede navegar fácilmente gracias a una estructura accesible y dinámica. Desde la ficha misma se interrelacionan diversas informaciones del catálogo. El usuario se convierte en una pieza fundamental en la difusión, porque puede compartir la experiencia a través de las redes y así dar más visibilidad al trabajo de investigación.