Una de las primeras acciones realizadas este año por el equipo de restauración de la Academia ha sido el tratamiento del conjunto La matanza de los inocentes por Herodes de José Ginés (Polop de la Marina, Alicante, 1768 – Madrid, 1823), escultor de la corte, que constituye el mayor grupo escultórico de todos los que formaron parte del llamado Belén del Príncipe, encargado por Carlos IV nada más llegar al trono.
El conjunto de la Academia es el más importante y numeroso de cuantos se conservan en la actualidad de lo que fue un enorme alarde escenográfico instalado todos los años en el Palacio Real, desde la Navidad hasta la fiesta de la Candelaria.
Desde su ingreso en la Academia, con motivo de la incautación hecha al infante Carlos María Isidro el 20 de agosto de 1837, estas 49 agrupaciones de figuras han constituido un conjunto único y de gran valor artístico y documental.
La matanza de los Inocentes se compone de grupos formados por soldados arrebatando los hijos a unas madres desesperadas que se defienden, se rasgan las vestiduras o permanecen inertes, paralizadas por el horror, contemplando a sus hijos degollados.
Madres desesperadas
En su manera de interpretar el pasaje bíblico, Ginés, con el violento movimiento de los personajes, destaca el agudo dolor y la crueldad de las escenas cargadas de dramatismo y tensión. Se aprecia una clara influencia de la escultura helenística del Laocoonte y sus hijos en las posiciones y las tensiones del cuerpo humano, en las torsiones imposibles que sacuden a los personajes. La tela es tan veraz que no parece barro; el realismo es extraordinario en la carne humana de los personajes que han muerto, las miradas de las madres que vibran y laten por el sufrimiento de sus hijos, las lágrimas a las que el escultor incorpora elementos de cristal…
El proceso de restauración ha sido una labor lenta y compleja durante la cual se ha obtenido información técnica acerca de la forma en que se elaboraban estas figuras de barro cocido policromadas al óleo, que alcanzan los 90 cm de alto.
Tras las inspecciones iniciales se observó que las esculturas presentaban varias intervenciones anteriores desafortunadas, las cuales enmascaraban la calidad de las policromías originales, dando lugar a una coloración pardo-grisácea. Por otro lado se encontraron importantes deterioros estructurales relacionados con su exposición y con los traslados sufridos. Así, presentaban roturas, fragmentaciones y pérdidas de elementos con daños significativos, particularmente graves en las extremidades.
La restauración ha permitido recuperar la fuerza y belleza de todo el conjunto, que en la actualidad se halla expuesto en el Museo de Bellas Artes de Valencia, y que se incluye en los actos conmemorativos del 250 aniversario de la fundación de la Academia de San Carlos.
Destacados mecenas
Los galardonados en la última edición de los Premios Iberoamericanos de Mecenazgo fueron el profesor Philippe de Montebello y Esther Koplowitz, quienes recibieron el reconocimiento de manos de la reina Doña Sofía.
Las ediciones anteriores reconocieron el compromiso de destacados mecenas, tales como los estadounidenses Daniel y Estrellita Brodsky, junto al matrimonio formado por Fernando Masaveu y Carolina Compostizo, en 2019; la baronesa Carmen Thyssen Bornemisza y Carlos Slim, en 2018; Carlos Fitz-James Stuart y Patricia Phelps de Cisneros, en 2017; o Elena Ochoa Foster y Bárbara Garza, en 2016.