Damien Hirst, conocido en todo el mundo por sus animales conservados en tanques de formol, no quiere ser académico. Así lo aseguró ayer Charles Saumarz Smith, secretario y director ejecutivo de la Royal Academy of Arts. Hirst sigue la estela de otros artistas, como Lucian Freud, Howard Hodgkin o Paula Rego, que se negaron a ingresar en la prestigiosa institución.
Damien Hirst, conocido en todo el mundo por sus animales conservados en tanques de formol, no quiere ser académico. Así lo aseguró ayer Charles Saumarz Smith, secretario y director ejecutivo de la Royal Academy of Arts. Hirst sigue la estela de otros artistas, como Lucian Freud, Howard Hodgkin o Paula Rego, que se negaron a ingresar en la prestigiosa institución.
El año pasado, otra artista polémica, Tracey Emin, sí que aceptó incorporarse a la Royal Academy of Arts. Sin embargo, el hecho de no ser académico no le impide a Hirst exhibir su obra en la institución. En la actual exposición de verano, de hecho, muestra una escutura de San Bartolomé desollado con la piel colgando de un brazo.