¿Qué queda de un hombre cuando le han quitado todo? Incomunicado, aislado del tiempo, sin estímulos ni nada material a lo que aferrarse, sus propios sentidos comienzan a traicionarle. Pero en su fuero interno hay algo que no le pueden quitar: su imaginación.

Septiembre 1973. Uruguay está bajo el poder de hierro de la dictadura militar. El movimiento guerrillero Tupamaros ha sido aplastado y desarticulado hace ya un año. Una noche de otoño, tres presos de ese movimiento son sacados de sus celdas en una operación militar secreta. Desde ese momento iniciarán un confinamiento en solitario, un recorrido por distintos cuarteles de todo el país sometidos a un macabro experimento; una nueva forma de tortura cuyo objetivo es traspasar su límite de resistencia mental.

La orden militar es precisa: ‘Como no pudimos matarles vamos a volverlos locos’. Durante más de una década, los presos permanecerán aislados en diminutas celdas en dónde pasarán la mayoría del tiempo encapuchados, atados, en silencio, privados de sus necesidades básicas, apenas alimentados y viendo reducidos al mínimo sus sentidos.

Empujados sus cuerpos y mentes hasta más allá de los límites, La noche de 12 años cuenta cómo lograron sobrevivir, cómo lograron mantener su voluntad y fortaleza, recrear su mundo, su visión y fantasía para de esta forma escapar a la terrible realidad que los condenaba irremediablemente a la locura.

Relato descarnado del cautiverio de unos personajes despojados durante 12 años de todo lo que nos constituye como individuos. Un descenso físico y mental para llevarlos a la locura cuyo objetivo último era aniquilar la resistencia del yo más íntimo. Debieron reinventarse desde los restos de su condición humana para resistir a uno de los desafíos más siniestros imaginables.

Viaje existencial

«Como director y guionista –comenta Brechner– este proyecto me ha llevado más de cuatro años de investigación y documentación. Uno de los grandes desafíos era que no fuese una película carcelaria sino un viaje existencial. Más allá de la meticulosa recreación histórica de los hechos, lo que quise es trasladar un viaje estético y sensorial en donde poder experimentar cómo se sobrevive a dicha batalla interior».

Los tres actores principales (Antonio de la Torre, Chino Darín y Alfonso Tort) tuvieron que realizar un durísimo esfuerzo de acondicionamiento mental y físico para acercarlos a las circunstancias extremas que padecieron. El resultado es de una credibilidad apabullante y cada uno de ellos logra instalar al espectador en el infierno que soportaron. Como también lo logran el resto de integrantes del reparto, como Soledad Villamil y Silvia Pérez Cruz, que interpreta también la canción principal de la película.

«La puesta en escena debía hacernos sentir como si estuviésemos con ellos, sumergiéndonos a esa lucha que se orquesta dentro del hombre para conservarse hombre. Fue un viaje oscuro pero extremadamente gratificante. Lleno de complejidades y desafíos, la película me reafirmó que aún en los momentos en dónde las circunstancias hacen parecer que todo está perdido, la fuerza y la resistencia del ser humano no debe ser subestimada», destaca Brechner.

José Mujica, Mauricio Rosencof y Eleuterio Fernández Huidobro nos cuentan una historia de superación y resistencia. Tres hombres que en la noche más oscura se aferraron a su espíritu para mantener su humanidad y esperanza.


La noche de 12 años

Dirección: Álvaro Brechner
Guion: A. Brechner sobre el libro Memorias del Calabozo, de Mauricio Rosencof y Eleuterio Fernández Huidobro
Intérpretes: Antonio de la Torre, Chino Darín, Alfosno Tort, César Troncoso
Fotografía: Carlos Catalán
Música: Federico Jusid, Silvia Pérez Cruz
España, Uruguay, Argentina, Francia, Alemania / 2018 / 122 minutos