Cuando Dickens inventó la Navidad

En 1843, Charles Dickens (Dan Stevens) se encuentra en el punto más bajo de su carrera, acumulando tres novelas que resultaron un claro fracaso y viendo como las deudas de su familia iban en preocupante aumento. Dispuesto como sea a recuperar su reputación decide escribir una historia sobre la Navidad y autoeditarla en menos de dos meses. En ese punto nace uno de los personajes más icónicos de su carrera, Ebenezer Scrooge (Christopher Plummer en la pantalla), co-protagonista de un proceso creativo mágico en torno al que gira la historia.

Así es. Basada en el libro homónimo de Les Standifort, El hombre que inventó la Navidad se centra en las seis semanas en las que un agobiado Charles Dickens escribió su novela con la intención de relanzar su carrera y, sobre todo, conseguir dinero para mantener el alto tren de vida al que se había acostumbrado.

Tras una sequía creativa notable mezcló inspiraciones de la vida real con personajes imaginarios que, como él mismo relataba, se le presentaban durante el sueño con apariencia de fantasmas. De esta forma, sostienen quienes defienden la leyenda que rodea el libro, consiguió cambiar las tradiciones asociadas a la Navidad y convertirla en la celebración que se conoce en la actualidad.

Bharat Nalluri (Un gran día para ellas) dirige una propuesta magníficamente ambientada en la que sobresale el papel del ganador de un Oscar Cristopher Plummer (Todo el dinero del mundo) que interpreta a Ebenezer Scrooge.

Por su parte Dan Stevens (La bella y la bestia, Downton Abbey) se pone en la piel de Charles Dickens. Completan el reparto Jonathan Pryce (Juego de tronos), Justin Edwards (Amor y amistad), Miriam Margolyes (La edad de la inocencia), Morfydd Clark (Orgullo y Prejuicio y Zombies) y Miles Jupp (Sherlock Holmes).

Envuelta en el espíritu de unas fechas destinadas al entendimiento, El hombre que inventó la Navidad se hace eco, como refiere Nalluri, del espíritu de quien dejó escrito que nada es más gratificante y humano que aligerar las cargas de otros. «Ese es el objetivo de nuestra película. Lograr que el espectador se vea envuelto en dos horas de diversión que, al tiempo, le hagan reflexionar sobre la importancia de hacer el bien».