Tras cinco años de preparación por parte de Herrero, tiempo en el que se ganó la confianza de las personas a las que retrata, la cámara se adentra con una naturalidad nada impostada en la vida laboral de unas mujeres que a través de sus conversaciones e inquietudes muestran, plano a plano, que las alianzas son esenciales cuando la sociedad en la que vivimos está dispuesta, con enorme facilidad, a juzgar y estigmatizar.
En el interior del mítico cabaret Barba Azul, en la Colonia Obrera de Ciudad de México, hay una habitación que se ha convertido en el espacio de descanso de las chicas que allí trabajan. Además es el lugar en el que se encuentran los aseos y en el que se maquillan y visten.
Talante
Cada noche, doña Olga, La Mami, encargada de mantener limpios los baños y guardarles sus pertenencias, desde la experiencia, casi cinco décadas después de haber trabajado como chica de compañía, les ofrece el calor y el consejo necesarios para asimilar el desafío al que se enfrentan cada noche en el salón de baile.
El talante de esa mujer infunde respeto a todas y una indisimulada admiración a la directora del documental: “La conocí una noche de celebración con amigos y descubrí muy pronto que es la madre postiza que todos necesitamos”.
Una y otra vez, la cámara de la toledana Laura Herrero, autora de una veintena de cortos y del también multipremiado largometraje El remolino, descansa en la humana y cómplice naturalidad de la protagonista.
“Aunque hay quien piense otra cosa, estamos ante trabajadoras sociales. Así las considero”, desde su silla afirma con orgullo y experimentada convicción la Mami. Así es. Lo que vemos entre las bambalinas del cabaret Barba Azul evidencia que con el orgullo no se comercia. Que pese a las apariencias, la dignidad no se vende.
La Mami
Dirección: Laura Herrero Garvín
Montaje: Ana Pfaff, Lorenzo Mora
Producción: Cacerola Films (México), Gadea Films (España)
España, México / 2019 / 81 minutos
Distribución: Elamedia Estudios