Al tiempo que el pasado Cannes bendecía a Abdellatif Kechiche y el turbulento amor entre dos mujeres que firmó como La vida de Adèle, Guiraudie sorprendía anotándose el premio al mejor director en el apartado Un certain regarde poniéndonos ante los ojos una carnal y descarnada visión de amores entre hombres. Posteriormente, el Festival de Sevilla confirmaría este más que visto bueno otorgándole, entre otros reconocimientos, el Giraldillo de Oro.
Retadora
Volvamos a lo dicho. No era difícil descarrilar y que con los condimentos apuntados y entre sabores excesivos, grasas y salsas picantes (casi todas muy picantes) la cocina acabara por ahumarse y el guiso se fuera al traste. Especialmente por el hecho de que el filme no escatima escenas de sexo gay explícito y eso es añadir riesgo al reto.
Pero, cuidado, porque estamos ante una de las alternativas cinematográficas más medidas e interesantes de los últimos meses. La historia nos sitúa en verano y en el entorno de un lago (único y gran escenario de todo el filme). Allí, como otros, acude Frank en busca de sexo puro y duro. Allí encuentra amistad y, -¡la carne y el espíritu son débiles!-, acaba por enamorarse de la peor de las posibilidades, un ser torvo que le conducirá a lo indeseable.
Tres son los personajes sobre los que gravita todo lo que vemos. Y lo que vemos es mucho y tórrido pero ¡tan bien contado!. El propio Guiraudie lo ha explicado al señalar que cada uno de los personajes representa cada una de las tres fases esenciales del amor porque, afirma: «El amor es entregarse en cuerpo y alma. Llegar hasta el final, incluso aunque suponga morir. En ese sentido, concluye, he intentado hacer una película romántica».
Paradojas
No es complicado deducir que nos zambullimos en un lago de excesos pero, como se ha comentado ya, tan bien estructurados que el resultado deviene en una propuesta suave en la aspereza, sugerente en lo explícito, tórrida, sí, pero surcada por una brisa tibia que acaba por envolvernos.
Véanla sin prejuicios y comprobarán que cuando los elementos se manejan con sentido y creatividad, los propios elementos, como tales, pasan a un segundo plano.
Vayan. Asistirán a una sesión de cine de verdad.
Dirección y guion: Alain Guiraudie
Intérpretes: Pierre Deladonchamps, Christophe Paou, Patrick d´Assumçao y Jérôme Chapatte
Fotografía: Claire Mathon
Productora: Les Films du Worso
Distribuidora: Karma Films
Francia / 2013 / 97 minutos