Enrico Emani (Servillo), secretario general de un importante partido político italiano, está hastiado de su vida pública. Sin que nadie pudiese sospecharlo, un día desaparece de la faz de la tierra sin dejar rastro alguno. Nadie sabe qué fue de él. El partido, que está perdiendo fuelle en su papel en la oposición ante las próximas elecciones, lo necesita. Todo se tambalea.
En ese punto crítico entra en escena su hermano gemelo Giovanni (también Servillo), un alocado y divertido filósofo con trastorno bipolar al que invitan a sustituir al desaparecido. Ahí lo tienen haciendo de político, moviéndose con una espontánea sinceridad que permite que aquel partido en cuesta abajo vuelva a la cresta de la ola. Los votantes comienzan a valorarle como próximo presidente de Italia.
Propuesta de cambios
Ese es el todo de un filme que propone el cambio en el ejercicio político de quienes lo desempeñan. Que insta a volver a situar a la política en el alma de los ciudadanos. Que grita que sinceridad, espontaneidad y cultura enganchan con lo que la gente quiere.
Cuando Andò publicó en 2012 El trono vacío, la novela que da pie a la cinta, el filósofo italiano Massimo Cacciari escribió: “Se trata en realidad de la contradicción fundamental en el ejercicio del poder. El poder es en esencia un arquetipo teatral; quien lo representa representa en realidad algo diferente a sí mismo, esconde siempre a un extraño. Y dicho extraño forma parte de su naturaleza, del mismo modo que lo hace un hermano gemelo”.
Por ahí van los tiros en esta película que rescata imágenes reales de Federico Fellini a principio de los años 80 mostrando su protesta ante el Parlamento italiano. Lo hizo para manifestar su rechazo a los anuncios que interrumpen las películas en televisión.
Protesta también Viva la libertà entre guiños, humor y drama. Su director resume la esencia del mensaje que nos deja: “Hay que dejar atrás la ficción como forma de cualquier gobierno”.
Dirección: Roberto Andò
Guion: Roberto Andò y Angelo Pasquini (Basado en la novela El trono vacío, de Roberto Andò)
Intérpretes: Tony Servillo, Valerio Mastandrea, Michela Cescon, Anna Bonaiuto, Eric Trung Nguyen, Hudith Davis y Andrea Renzi
Música: Marco Beta
Fotografía: Maurizio Calvesi
Productoras: Bibi Film y Rai Cinema
Distribuidora: Caramel Films
Italia / 2013 / 94 minutos