Cuerda pasó por el seminario antes de comenzar los estudios de Derecho, que abandonó para dedicarse a la radiodifusión y televisión. En Televisión Española colaboró en los servicios informativos, dirigió programas culturales y ejerció de realizador de las películas El túnel, adaptación de la novela de Ernesto Sábato, y Mala racha.
En los ochenta afianza su trayectoria como director de largometrajes. Debuta en el cine con Pares y nones, encasillada en la “comedia madrileña”; Total, precedente del “surrealismo rural”; y El bosque animado, adaptación de la novela de Wenceslao Fernández Flórez. Con posterioridad dirige La lengua de las mariposas, a partir del texto de Manuel Rivas, y Los girasoles ciegos, adaptación de la obra de Alberto Méndez.
Amanece, que no es poco se convertirá en un hito en la cultura y el cine español y proyectará el reconocimiento de José Luis Cuerda a la categoría de los más grandes realizadores de cine. El “retorcimiento de la realidad” se articula en torno al humor del absurdo, con un elaborado pensamiento filosófico.
En su amplia producción artística cabe mencionar también sus escritos, tanto en formato de publicaciones impresas como de guiones, y sus menos conocidos dibujos. José Luis Cuerda ha destacado igualmente en su faceta de productor cinematográfico, tanto de películas propias como de las renombradas Tesis, Abre los ojos y Los otros, de Alejandro Amenábar.
Es un artista fundamental para la Real Academia por su capacidad creadora, con estilo propio, que aúna el bagaje de la comedia y la picaresca española, todo ello apuntalado con un profundo sentimiento ético y humano.
La Real Academia se suma a los reconocimientos y menciones que ha recibido, como el Premio Nacional de Bellas Artes, la Medalla de Oro de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la Medalla de Honor de la Universidad Carlos III de Madrid y el Premio de la Xunta de Galicia por su contribución al cine gallego, además de los numerosos premios concedidos a sus películas.