Como ya hiciera en Jackie con la viuda de Kennedy, el realizador chileno pone foco y entra a saco en la existencia de otra de esas mujeres que la historia ha convertido en leyenda. Larraín no se corta y deja en la pantalla un descarnado retrato de una Diana Spencer terriblemente sola y cercada por la insostenible situación a la que la somete el entorno. Una mujer que, en un quiebro de un guion que a pesar de su solidez a ratos roza la caricatura, sueña con el fantasma de Ana Bolena y su dramático final.

A lo largo del relato no queda muy bien parado su ilustre marido. Mientras ella va perdiendo el equilibrio, lo que podría haber sido un confortable respiro vacacional con sus hijos en el castillo del Condado de Norfolk deviene en un insoportable ejercicio de aguante ante la encorsetada sucesión de obligaciones no deseadas.

Mientras Carlos no oculta su querencia por su «amiga» Camilla Parker-Bowles, Diana tiene que interpretar el papel de la amada y fiel esposa delante de los paparazzi que siguen implacables cada uno de sus movimientos.

A través de una espléndida puesta en escena y un marco que no defraudará en absoluto a quienes esperan el desfile de vestuario y estancias que lo que se cuenta exige, sobre la película gravita un interrogante clave: ¿Aceptará la protagonista su posición o se rebelará y decidirá afrontar su vida tal y como desea?

En el papel protagonista, Kristen Stewart se declara cómplice de la mujer a la que representa: “He intentado clavar sus gestos, su peculiar acento, sus movimientos… para lo que lo vi y lo leí todo sobre ella. Me ayudó mucho el apoyo incondicional del director que me convenció de que era la mejor actriz para darle vida, algo que ni yo misma tenía claro”. El resultado evidencia que Larraín tenía razón. Stewart se funde con Spencer y en ella vemos a la Diana que en su día reflejaban los medios de comunicación.

Tras pasar por los festivales de Venecia, Toronto, San Sebastián y el London Film Festival, Spencer ha suscitado atención y elogios al tiempo que deja en el aire las lógicas dudas sobre la opinión de la propia familia real británica sobre el fondo y la forma de lo filmado.

Spencer

Dirección: Pablo Larraín

Guion: Steven Knight

Intérpretes: Kristen Stewart, Jack Farthing, Timothy Spall, Salli Hawkins, Sean Harris, Jack Nielen, Freddie Spry

Reino Unido, Estados Unidos, Chile, Alemania / 2021 / 111 minutos

Diamond Films