Una historia sobre la dura lucha por cumplir los sueños en la ciudad de Los Ángeles no podría haber tenido un final más propicio. Anoche, Warren Beatty y Faye Dunaway, encargados de anunciar la cinta ganadora del Óscar a mejor película, el mayor honor de todos, proclamaron a La La Land como vencedora debido a un error en la tarjeta que habían recibido, que a quien en realidad mencionaba era a Emma Stone, que ya había recibido su premio a mejor actriz por el musical de Damien Chazelle.
Mientras Fred Berger, uno de los productores de la película, agradecía a los suyos su apoyo, le fue comunicado el error. «Por cierto, hemos perdido», concluyó. Jordan Horowitz, otro de los productores del musical, tuvo que aclarar que no se trataba de una broma, y pidió a los responsables de Moonlight que subieran a recoger un Óscar que él mismo les entregó. «Ni en mis sueños esto puede ser cierto», dijo Barry Jenkins, director de la auténtica vencedora.
No obstante, fue La La Land la más galardonada de la noche. De las 14 nominaciones con las que partía volvió a casa con seis premios: dirección (Chazelle batió el récord de director más joven premiado, con 32 años y un mes, adelantando por unos meses al anterior dueño de tal honor, Norman Taurog por Las peripecias de Skippy), actriz (Emma Stone), fotografía (Linus Sandgren), diseño de producción (David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco), música (Justin Hurwitz) y canción (City of stars, de Hurwitz, Benj Pasek y Justin Paul).
Sin Óscar para España
Casey Affleck recogió emocionado su Óscar a mejor actor por Manchester frente al mar, que también ganó el premio a mejor guion original (firmado por su director, Kenneth Lonergan); en el caso del mejor guion adaptado, fueron Barry Jenkins y Tarell Alvin McCraney los agraciados por Moonlight, que también consiguió el de mejor actor de reparto para Mahershala Ali.
Viola Davis se hizo con el Óscar a mejor actriz de reparto por su papel en Fences, dirigida por un Denzel Washington que quedó visiblemente compungido al ver desaparecer su eunuco a mejor actor en manos de Affleck.
Zootrópolis consiguió el honor de mejor película de animación en una noche en la que la iraní El viajante, de Asghar Farhadi, ganó el Óscar a mejor película en habla no inglesa, hecho que subrayaba la ausencia de su director como protesta por el veto migratorio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. O. J.: Made in America se convirtió en el mejor documental. En el apartado de cortometrajes, el húngaro Mindenki derrotó al español Timecode en la categoría de ficción, mientras que The white helmets y Piper fueron premiados como mejores cortometrajes documental y de animación, respectivamente.