Hija de dos emigrantes judíos afincados en el Bronx, Bacall inició a los 15 años sus estudios en la American Academy of Dramatic Arts, que se costeó trabajando como modelo y acomodadora en un cine. Aunque debutó como actriz en 1942 en la obra de Broadway Johnny 2 X 4, su gran presentación sería en 1944 con Tener y no tener, cinta de Howard Hawks en la que conoció a Humphrey Bogart, con quien contraería matrimonio un año más tarde. El director la descubrió a sus 17 años en la portada de la revista Harper’s Bazaar y, fascinado, decidió incluirla en su película.
Con Bogart repetiría en El sueño eterno (1946), La senda tenebrosa (1947) y Cayo Largo (1948). En 1953, Bacall se uniría a Marilyn Monroe y Betty Grable en la comedia Cómo casarse con un millonario, todo un éxito de crítica y público. Más tarde, en 1956, sus compañeros de reparto serían Rock Hudson, Dorothy Malone y Robert Stack en Escrito en el viento. Cuatro meses más tarde del estreno de Mi desconfiada esposa (1957), comedia de Vincente Minnelli en la que compartía escena con Gregory Peck y por la que recibió críticas muy favorables, Bacall debía despedirse de Bogart, quien sucumbió al cáncer de esófago que padecía.
En los años setenta, la intérprete bajó su ritmo laboral. En 1974 participó en Asesinato en el Orient Express junto a Ingrid Bergman, Jacqueline Bisset, Anthony Perkins, Vanessa Redgrave, Sean Connery y Albert Finney, entre otros. Dos años más tarde compartió plano con John Wayne en El último pistolero, la última película del actor consagrado en western.
Figura clave en la Edad de Oro del cine
Entre sus trabajos más recientes destacan Misery (1990), junto a James Caan y Kathy Bates; Prêt-à-porter (1994), de Robert Altman; Diamonds (1999); Dogville (2003) y Manderlay (2005), ambas de Lars von Trier; y El celo (1999), adaptación de la novela de Henry James Otra vuelta de tuerca en la que aparecía junto a Harvey Keitel.
En 1996, la actriz fue nominada al Oscar como mejor actriz de reparto por su papel en El amor tiene dos caras, drama romántico dirigido y protagonizado por Barbra Streisand en el que también aparecía Jeff Bridges. Sin embargo, no fue hasta 2010 que Bacall recogió su estatuilla, un Oscar honorífico en reconocimiento a su papel central en la Edad de Oro del cine estadounidense.
Sobre las tablas, la actriz participó en producciones como Goodbye, Charley (1959), Cactus flower (1965), Woman of the year (1981), Dulce pájaro de juventud (1985) y Applause (1970), un musical basado en Eva al desnudo en el que interpretaba al personaje que encarnó en el cine Bette Davis, quien visitó a Bacall en el backstage para felicitarla sentenciando que ella era la única que podía interpretar ese papel.
Además de su legado cinematográfico, la actriz deja tras de sí dos autobiografías en la que da buena cuenta de su apasionante vida, Lauren Bacall by myself (1978) y Now (1994).