Dirigida por Christopher Nolan, que logra así su segundo Óscar mientras que su esposa y productora Emma Thomas obtiene el primero, y protagonizada por Cillian Murphy -ambos fueron reconocidos con la figura dorada en sus respectivas categorías, el actor en su sexta colaboración con el realizador-, Oppenheimer logró otros cinco galardones en los apartados de montaje, dirección de fotografía, banda sonora y mejor actor de reparto, en la figura de Robert Downey Jr. Un apartado, el de intérpretes secundarios, en el que barrió en la cara femenina Da’Vine Joy Randolph por su participación en Los que se quedan.
Conducida por cuarta vez por un anodino Jimmy Kimmel, la ceremonia del Dolby Theatre de Los Ángeles tuvo su momento cumbre en la actuación de Ryan Gosling, que puso a bailar al patio de butacas al ritmo de I´m Just Ken, tema incluido en la banda sonora de Barbie, otra de cuyas propuestas, What Was I Made For?, interpretada por Billie Eilish, se llevó el premio a mejor canción original, único Óscar que recolectó el filme de Greta Gerwing.
Pobres criaturas, el largometraje de Yorgos Lanthinos, se convirtió en el segundo más premiado al lograr, además del que señala a la mejor actriz protagonista, segunda estatuilla para una entregada Emma Stone, los de diseño de producción, vestuario y maquillaje y peluquería.
Las esperanzas españolas se quedaron en eso, ya que La sociedad de la nieve -multipremiada en los Goya-, nominada en el apartado de película internacional, tuvo que rendirse ante la inquietante La zona de interés [1], presentada por Reino Unido pero íntegramente hablada en alemán.
Tampoco logró el Óscar al mejor largometraje de animación Robot Dreams, del Pablo Berger pues, con El chico y la garza, el mítico Hayao Miyazaki repitió el premio logrado en 2002 con El viaje de Chihiro. España, pues, se fue de vacío.
Como se fueron otras propuestas que integran un apartado, el de olvidos, ¿olvidos?, que en algunos casos resultaron, cuando menos, clamorosos. Y el caso más llamativo es el de Los asesinos de la luna [2], el extraordinario film de Martin Scorsesse que no logró ni una mísera estatuilla. ¿Por qué? Los porqués se nos escapan pero dieron lugar al rictus amargo de Robert de Niro, que optaba a mejor actor de reparto, y al punto de decepción en el rostro de Lily Gladstone, que competía en la categoría de actriz protagonista tras haberse llevado el premio del Sindicato de Actores, que como se sabe es un prólogo casi siempre fiable de lo que más tarde se reconoce en los Óscar.
Y entre las olvidadas pero no olvidables Vidas pasadas [3], la cautivadora historia llena de verdad firmada por Celine Song, que optaba a mejor película y guion y que también se fue en blanco (misterios guarda la ciencia de los jurados).
En el ámbito de los guiones, los premios fueron para Anatomía de una caída, potente apuesta francesa para el apartado original, mientras el adaptado se le otorgó a la correcta American Fiction.
Y así fue transcurriendo una velada que, salvo momentos puntuales, no pasará a la historia por haber deslumbrado. En la parte final, un encorvado Al Pacino (el tiempo pasa para todos) comunicó el gran Óscar para Oppenheimer, cuestionada por algunos pues prácticamente no alude a las víctimas de los mortíferos artefactos que salieron de sus manos.
Momentos antes, y al recoger el premio al mejor documental para 20 días en Mariúpol, primer Óscar de la historia para Ucrania, su realizador, Mstyslav Chernov, comentó: «Probablemente soy el primer director en este escenario en decir que hubiera preferido no haber hecho nunca esta película si a cambio Rusia no hubiera atacado Ucrania y ocupado nuestras ciudades».
Periodistas ucranianos que trabajaban para la agencia Associated Press lograron a lo largo de tres semanas las impactantes imágenes de un documental ya reconocido con el Pulitzer, el Bafta o el premio del público en el Festival de Sundance.
Mientras en los alrededores del Dolby Theatre los manifestantes exigían el alto el fuego en Gaza, en el interior del recinto resonaban las palabras de quienes apostaban por la paz, como el propio Cillian Murphy, que al agradecer su premio concluía: «Estamos viviendo en el mundo creado por Oppenheimer. Quiero dedicar esto a la gente que hace y lucha por la paz en cualquier parte».
Palmarés
– Mejor película: Oppenheimer
– Director: Christopher Nolan por Oppenheimer
– Actor principal: Cillian Murphy por Oppenheimer
– Actriz principal: Emma Stone por Pobres criaturas
– Guion original: Arthur Harari y Justine Triet por Anatomía de una caída
– Guion adaptado : Cord Jefferson por American Fiction
– Actor de reparto: Robert Downey Jr. por Oppenheimer
– Actriz de reparto: Da’Vine Joy Randolph por Los que se quedan
– Película internacional: Zona de interés, de Jonathan Grazer (Reino Unido)
– Película animada: El niño y la garza, de Hayao Miyazaki.
– Documental: 20 días en Mariúpol, de Mstyslav Chernov
– Diseño de producción: Pobres criaturas
– Montaje: Oppenheimer
– Fotografía: Oppenheimer
– Diseño de vestuario: Pobres criaturas
– Maquillaje y peluquería: Pobres criaturas
– Sonido: La zona de interés
– Banda sonora: Lugwig Göransson, por Oppenheimer
– Canción: What Was I Made For?, de Barbie
– Efectos especiales: Godzilla Minus One