La historia nos suena porque pudo ocurrir cerca de aquí. Hace un año, la monja sor María, que se hizo famosa por su imputación en los casos de bebés robados ocurridos en Madrid a principio de los años 80, moría a los 88 años. La principal sospechosa de los delitos fallecía sin haberse enfrentado a la justicia. El espeluznante caso resulta tener réplicas similares en otros países de Europa.

Philomena adapta una historia real sobre niños vendidos que dio comienzo hace unos cincuenta años en Irlanda. La búsqueda del hijo perdido (robado) de la protagonista es la columna vertebral de un relato sobre el perdón, el amor y la atípica amistad que nace entre la mujer que busca a su hijo y el periodista que le ayuda en la investigación.

Judi Dench está tan impecable como cabría esperar y el coguionista Steve Coogan, que interpreta al periodista en horas bajas que dio a conocer la historia real, le da la réplica en un juego de contrastes: vieja y joven, hombre y mujer, católica practicante y descreído, la franca y el cínico…, en este toma y daca radica uno de los sustentos de la aventura en la que se embarcan.

Interés humano

La película avanza haciendo malabarismos sobre la cuerda floja del dramón sensiblero, pero nunca llega a caer al vacío. Al final queda una historia de interés humano bienintencionada y ‘bienqueda’ que no hace sangre en ninguno de los escabrosos temas que toca. Ni el catolicismo ni el periodismo, blancos fáciles donde se podría haber cebado Philomena, salen escaldados.

Al final parece que el resultado queda condicionado por su condición de historia real. Si en la propia película se ve cómo el personaje de Coogan, el periodista que quiere ayudar a la protagonista pero beneficiarse también contando la historia en los medios, lucha consigo mismo para no traicionar a Philomena, da la sensación de que los responsables del filme han preferido no cabrear a la Philomena real con una película especialmente dura o escorada ideológicamente.

Philomena es un drama descafeinado que se basa en un par de personajes tiernos, divertidos, sufridos y luchadores con los que es muy difícil no empatizar. Difícil lo tiene de cara a los premios pero nunca se sabe lo lejos que puede llegar una historia de interés humano.

Philomena
Dirección:  Stephen Frears
Intérpretes: Judi Dench, Steve Coogan
Guion: Jeff Pope, Steve Coogan
Música: Alexandre Desplat
Fotografía: Eobbie Ryan
Estados Unidos / 2013 / 98 minutos