Allá por el siglo IV a. C., el general chino Sun Tzu predicó en El arte de la guerra que la estrategia suprema consiste en someter al enemigo sin darle batalla. La auténtica guerra, como el hábito, va por dentro, y es un error de personas demasiado impetuosas lanzarse a la fuerza bruta.
Hou Hsiao-Hsien parece haberse empapado bien de las enseñanzas del autor de la biblia de la estrategia militar, y en The assassin presenta una cinta de acción con ritmo de drama íntimo y una historia de artes marciales en la que estas aparecen ante el espectador como un infarto: cuando menos lo espera y sorprendentemente rápido.
Exhibida en las secciones oficiales del Festival de Toronto y el de Nueva York, fue el de Cannes el que la encumbró con la Palma de Oro a mejor director. Si bien el trabajo de Hou tras la cámara merece un reconocimiento indiscutible (más allá de los desconcertantes cambios de formato), apoyado en la gran labor fotográfica de Mark Lee Ping-Bing, la crítica no se ha puesto de acuerdo a la hora de valorar la película en su conjunto.
Retrato de dos tensiones
No es The assassin una película para todos los paladares. El espectador puede entrar algo confundido esperando encontrar un filme de acción con grandes coreografías de lucha, al estilo de lo que hizo Wong Kar Wai en The Grandmaster. Es, sin embargo, un trabajo narrado con parsimonia, con el tempo lento de un observador paciente.
Hou está más interesado en retratar los ambientes, los momentos de tensión que rodean a una batalla, que esta en sí. Dos tensiones principales atraviesan la película: la muerte que nuestra protagonista quiere dar a su primo, gobernador de la provincia de Weibo, y la amenaza de conquista a la que hace frente dicha provincia.
Shu Qi, estrella del cine taiwanés, encara la película sin apenas pronunciar palabra. Su interpretación, como el guion de la cinta, se apoya más en lo que desconocemos que en lo que se nos revela explícitamente. Impasible durante gran parte del metraje, deja finalmente entrever sus sentimientos, humanizando un personaje tan inicialmente gélido.
No es fácil acercarse a The assassin. Su propuesta, más cercana al cine de arte y ensayo que al de acción, puede suponer una barrera para el público menos paciente, por lo que conviene entrar en la sala con cautela. Quienes disfruten de los trabajos íntimos, más entregados a la poética visual que al entretenimiento, y tengan a mano paciencia para dejarse encandilar, quizá encuentren en The assassin un producto elogiable y asombrosamente hermoso.
Dirección: Hou Hsiao-Hsien
Guion: Chu T’ien-wen, Hou Hsiao-Hsien, Hai-Meng Hsieh, Zhong Acheng
Intérpretes: Shu Qi, Chang Chen, Zhou Yun, Tsumabuki Satoshi, Hsieh Hsin-Ying, Ethan Juan, Ni Dahong, Yong Mei, Lei Zhenyu
Música: Lim Giong
Fotografía: Mark Lee Ping-Bing
Montaje: Liao Ching-Song, Paulie Huang Chih-Chia
Taiwán / 2015 / 105 minutos