Jared (Lucas Hedges) es el hijo de un pastor baptista en una pequeña localidad de Estados Unidos. Con 19 años, el joven decide contarles a sus padres, Nancy (Nicole Kidman) y Marshall (Russell Crowe), que es homosexual. A partir de ese momento tendrá que afrontar un ultimátum: o asistir a un programa de terapia para intentar redirigir sus tendencias sexuales o vivir desterrado y repudiado por su familia, sus amigos y su fe.
La traumática realidad a la que el espectador asiste parte de las memorias de Garrard Conley, Boy Erased: A Memoir of Identity, Faith, and Famil (Penguin Random House, 2016), que vivió en primera persona la atrocidad que describe. El filme se apoya con solidez en las contenidas y veraces actuaciones de Nicole Kidman, Russell Crowe, Joe Alwyn, Xavier Dolan , Lucas Hedges y el propio Edgerton.
Fueron precisos diez años para que Garrard Conley superara sus temores y comenzase a escribir los detalles de la ‘terapia’ a la que fue sometido. Como muchos supervivientes de una experiencia tan traumática, el escritor no podía apartar el sentimiento de culpabilidad, vergüenza y remordimiento por algo que de ningún modo podía controlar.
Gracias a las redes sociales empezó a leer un sinfín de relatos personales escritos por otras personas sometidas a la ‘terapia de conversión’. Entonces se dio cuenta de que compartir su historia no era una opción, sino una necesidad. Se hizo con las riendas de sus miedos y canalizó toda su energía en escribir Boy Erased. Garrard Conley había hecho lo que nadie antes: poner cara, nombre y voz a las atrocidades. Al hacerlo lanzó un salvavidas a otros jóvenes y adultos que habían pasado por lo mismo.
El protagonista
«Han transcurrido catorce años desde que me obligaron a seguir una ‘terapia de conversión’ en el centro Love in Action, sin embargo, las imágenes, los sonidos y las texturas siguen tan nítidas como si hubiera sido ayer», afirma el propio autor. «Catorce años no han podido borrar el dolor de mi trauma, pero me han enseñado mucho. Cuando Joel Edgerton, Lucas Hedges y el coproductor y actor David Craig fueron a casa de mi familia en Arkansas para documentarse de primera mano con la intención de adaptar mis memorias al cine, vi reflejado mi punto de vista en la forma en que aquellos extraños hablaban sinceramente con mis padres baptistas. Se tomaban en serio mi historia y la historia de mi familia».
Como comenta el protagonista: «En aquel pequeño salón, la ‘terapia’ dejó de ser un tema de sátira o una broma de mal gusto, dejó de ser una preocupación pueblerina para mostrarse cómo es realmente, una práctica con trágicas consecuencias que existe desde tiempos coloniales, y cuyos perdurables efectos no solo alteran dramáticamente la vida de personas sino también la de su familia y amigos. Da igual ser el sujeto o el objeto de un prejuicio, ambas partes acaban dañadas”.
Respecto al objetivo último que le animó a implicarse en el proyecto, el propio Conley explica: «Nuestra intención, al contar mi historia, es ofrecer palabras de solidaridad a todos los que han pasado por esto. Pero también nos preguntamos cómo puede imponerse semejante intolerancia a seres queridos. Queremos ofrecer algún tipo de contexto para que el espectador entienda que este tipo de injusticia social no siempre parte de monstruos, sino de personas cercanas a nosotros, figuras trágicas cuya decencia se ve superada a menudo por sus acciones. ‘Quiero que tu padre se convenza de que no debía hacer lo que hizo, que estaba mal. Y quiero hacerlo en un idioma que sea comprensible para él y para otros como él’. Me dijo Joel tras aquella conversación. Aquellas palabras me convencieron definitivamente».
En la actualidad, 36 estados de Estados Unidos tienen leyes contra la ‘terapia de conversión’, y en otros 14, incluido Washington DC, se han aprobado proyectos legislativos para proteger a los jóvenes de la comunidad LGBTQ de dichas prácticas. La Asociación Psiquiátrica Americana estima que sus riesgos potenciales son muy elevados e incluyen depresión, ansiedad y comportamientos autodestructivos.
Identidad borrada
Dirección: Joel Edgerton
Guion: J. Edgerton a partir del libro Boy Erased de Garrard Conley
Intérpretes: Lucas Hedges, Nicole Kidman, Russell Crowe, Madelyn Cline, Troye Sivan, Joel Edgerton, Joe Alwyn, Xavier Dolan, Théodore Pellerin
Fotografía: Eduard Grau
Música: Jonny Greenwood
Estados Unidos / 2018 / 114 minutos