Vivir es fácil con los ojos cerrados [1], de David Trueba, fue una de las cintas más queridas del pasado año. Apoyada en la historia real de un profesor de Inglés que viajó a Almería en 1966 para conocer a John Lennon, se hizo con seis Goya, tres Medallas del Círculo de Escritores Cinematográficos, un Fotogramas de Plata y dos Feroz, entre otros premios, reivindicando nuevamente a Javier Cámara como actor a tener en cuenta e introduciendo a la primeriza Natalia de Molina.
Tras el anuncio de la Academia de Cine, la película de Trueba regresa a las carteleras españolas este viernes, 26 de septiembre.
En el lado de sus rivales, 10.000 km [2], ópera prima de Carlos Marques-Marcet protagonizada por Natalia Tena y David Verdaguer, hace un sutil y desgarrador retrato del amor y el desamor en la era 2.0, con una pareja que enfrenta el reto de una relación a distancia a través de los dispositivos digitales. Ganadora de cinco Biznagas en el pasado Festival de Málaga (mejor película, director, actriz, guion novel y Premio de la Crítica), Premio Especial del Jurado al mejor dúo interpretativo en la última edición del South by Southwest de Austin y Premio Especial del Jurado al mejor director novel en el pasado Festival Internacional de Cine de Seattle, se perfilaba como la apuesta más innovadora e independiente del trío candidato a los Oscar.
Por su parte, El Niño [3], el thriller de Daniel Monzón sobre narcotráfico en el Estrecho de Gibraltar, lleva liderando durante varias semanas consecutivas la taquilla española, convirtiéndose en la mejor apertura de una película española en este año con los 2,85 millones de euros de su primer fin de semana y con 12,1 millones de recaudación por el momento. Veteranos como Luis Tosar e Ian McShane comparten protagonismo con el debutante Jesús Castro.