La figura del archivista musical, aquel que recolecta canciones del folclore popular y de la música tradicional de una región, es una persona, por definición, conservadora. Pero el conservadurismo no implica siempre inmovilismo, para que algo sobreviva tiene que adaptarse al medio o, como se decía en El Gatopardo, «algo tiene que cambiar para que todo siga igual».

Sam Lee colecciona, restaura y comparte música tradicional de Gran Bretaña e Irlanda; sobre todo de las comunidades nómadas gitanas. Realiza una labor cultural didáctica y divulgadora a través de The Nest Collective y otras instituciones estatales. En su faceta artística, el inglés reinterpreta las viejas composiciones con arreglos modernos, como en el caso de «Jonny O’the Brine» de su disco «The Fade in Time» (2015), una antigua balada escocesa a la que sumerge en un ambiente de percusiones vanguardistas y vientos selváticos.

Define la década porque Sam Lee es uno de los mejores restauradores de los 2010s, no realiza una labor taxidermista, trabajando con naturaleza muerta sino que insufla una nueva vida a las viejas formas e historias. Un arqueólogo e historiador con tanto respeto por el material original, que lo cambia por completo para que siga vigente y continúe su larga travesía por el tiempo.