Sofía Coppola estrenó «Lost in Translation» (2003) el mismo año en el que se divorció del también director de cine Spike Jonze. Fueron muchos los que interpretaron este film, protagonizado por Scarlett Johansson como una alegoría de su errática relación y su sentimiento de desamparo. Después Jonze empezó un noviazgo con Karen O, cantante de Yeah Yeah Yeahs. Probablemente la distancia por compromisos profesionales de ambos hizo que la cosa no siguiera adelante, aunque mantuvieron una relación creativa que se materializó en la banda sonora de «Where The Wild Things Are» (2009) y en la canción «The Moon Song» de la película «Her» (2013). 

En «Her», el personaje de Joaquin Phoenix está intentando superar el duelo de un divorcio. No fueron pocos los que interpretaron este film como una respuesta del director a la hija Francis. Los paralelismos de «Her» y «Lost in Translation» son múltiples, pero por encima son dos películas que hablan de la soledad y de estar desubicado en la vida moderna. Theodor, el protagonista de «Her» , encuentra confort y amor en la voz de Samantha, la inteligencia artificial interpretada por Scarlet Johansson. Su tiembre es dulce y ronco, como podemos escuchar en «The Moon Song», la canción que los dos enamorados componen juntos en la ficción. En la realidad fueron Jonze y Karen O los autores de esta linda canción de amor, tan cálida y humana, tan imperfecta y sencilla, que te parece normal caer rendido ante tal sistema operativo. 

Define la década porque «Her» ha sido una de las distopías más bonitas vistas y una de las películas de la década. Frente al difícil y frío mundo hiperdigitalizado y en red, surgen espejismos de autenticidad, de calor orgánico. «The Moon Song», con nada más que con un ukelele y la voz de Scarlett, llena de defectos, llena de vida, nos arrullan en un tierna historia «un poco Black Mirror» (expresión tan de los 2010s).