King Tubby y Lee Perry fueron dos ingenieros de sonido jamaicanos que elevaron su labor técnica a un nivel artístico y creativo. Sus reverbs, samplers y ecos otorgaron más profundidad a las canciones de reggae, expandiendo sensorialmente la música y siendo pioneros de un tratamiento que ha influído de manera definitoria en la música del s.XX.

Aaron Coyes e Indra Dunis vivían de vender ropa y discos antiguos mientras hacían música de baja fidelidad; electrónica brumosa y experimental con ninguna pretensión comercial. Una actuación en el Festival KRAAK de 2010 les permitió al dúo escuchar su propia música en un equipo de alta calidad, lo que les impulsó a alquilar un estudio de grabación por primera vez y grabar «936» (2011), un disco psicodélico y atmosférico pero con mayor concesión a la melodía pop. «All The Sun That Shines» tiene claramente una reminiscencia jamaicana con teclados que se extienden y guitarras cavernosas; pero también tiene cajas de ritmos complejas y sintetizadores espaciales; una canción etérea, detallista y meticulosa.

Define la década porque Peaking Lights han sido uno de los mejores transmisores de la música dub, y lo ha hecho desde la perspectiva de la electrónica lo-fi que imperó a principios de los 2010s a través de la chillwave, con grupos similares como Sun Araw o Eternal Tapestry. «All The Sun That Shines» es un ejemplo de psicodelia hipnagógica, música jamaicana experimental hecha desde Wisconsin, tan relajante como psicoactiva.