El mismo año que se formó la banda Coldplay, 1996, The Chemical Brothers y Noel Gallagher (Oasis) se juntaron para realizar «Setting Sun», una pieza de electrónica de baile con fuertes ritmos y psicodelia oscura. Los adalides del brit-pop y el big beat se unían por entonces en un ejercicio de vanguardia popular con el que conquistaron al público inglés. 21 años después, Coldplay se une a otro dúo electrónico, The Chainsmokers, para realizar otro hit, pero las cosas habían cambiado por completo. 

Tanto Coldplay como The Chainsmokers comenzaron sus andaduras en años en los que su género estaba en lo más alto, el brit-pop en 1996 y el EDM en 2012. Las dos formaciones han significado la versión más mainstream de sus estilos, con hits globales que irritan a unos pocos, pero que encandilan a muchos más. En «Something Just Like This» (2017) unifican fuerzas para aportar su know-how particular, por un lado los británicos ofrecen su habitual candor y los americanos los sintetizadores entrecortados tan en boga. Una canción que dice que no hace falta tener superpoderes para afrontar una relación. Efectivamente, para conquistar el mundo no hace falta ser pluscuamperfecto.

Define la década porque «Something Just Like This» es la quintaesencia del pop comercial blanco de la segunda mitad de los 2010s, y miles de millones de reproducciones en Spotify y YouTube lo certifican. La electrónica de baile que llegó tarde pero con fuerza a USA, ya ha pasado ser música prácticamente conservadora. La tierna voz de Chris Martin ablanda la electrónica moderna de The Chainsmokers, para hacer una balada épica apta para todos los públicos. Los británicos reafirmaron su lugar en la cumbre del pop y The Chainsmokers por temas como este o «Closer» (2016) terminaron 2019 siendo los DJs mejor pagados del mundo.