21 Dic Chairlift – «I Belong in your arms» (2012)
En los inicios de los 2010s, el synth-pop gozó de una segunda juventud con la resurrección del sintetizador analógico. Los grupos que lo invocaron ya venían con la lección aprendida de la electrónica de club y con la ventaja de poder crear infinitas texturas con los nuevos softwares, por lo que era muy tentador centrarse en la sonoridad, en la tecnología, pero con el peligro de olvidarse de la estructura. Mucho synth y poco pop.
Con el single «Bruises» (2008), Chairlift habían demostrado que podían encandilar, al menos, a los creativos publicitarios de Apple. El combo afincado en Brooklyn puso banda sonora a un anuncio del iPod nano, siendo así la quintaesencia de la modernidad y lo «cuqui», pop naif pero cinco jotas. Sin embargo para su siguiente disco, «Something» (2012) las cosas habían cambiado, incluso a mejor. Por lo pronto, sus componentes Patrick Wimberly y Caroline Polachek gozaban de un momento muy dulce con sus respectivas parejas, y por otro lado, el dúo apostó por una producción y unas estructuras mucho más complejas, que les desquitaran de la etiqueta de «grupo de anuncio». De esos dos factores salió «I Belong in Your Arms», una delicia que retoma el sonido de los 80 con la mejor tradición melódica de los 50 y 60; una canción que queda suspendida en un limbo entre el pop mainstream y el avant-pop independiente.
Define la década porque «I Belong in your arms» muestra la excelencia del renacimiento del synth-pop en estos 2010s. La voz de Polachek embelesa, pero también el bajo, la batería electrónica, el estribillo, el puente… Es una gema que cuida contenido y forma, tradición y modernidad, arte y pop. La tristeza llegó en 2016 cuando la banda se separó para caminar por separado, nunca pudiendo repetir obras como esta, una oda al enamoramiento desde el amor a la música.
No Comments