Desde que nació ha tenido lápices entre las manos por lo que no hay una edad exacta, de esas que se señalan en las biografías, que destacar especialmente. Es más sencillo que todo eso, Adara recibía clases de pintura y dibujo al mismo tiempo que aprendía a leer y sumar.

Quizás sus padres ya intuyeran que terminaría estudiando Bellas Artes en su ciudad natal, y que volaría lejos para satisfacer sus ansias de saber. Tras licenciarse se desarrollaba un poco más con un posgrado en ilustración en Barcelona. Ahora, como ella dice, vuelve a «disfrutar del sur y sus soleados días» mientras atiende diferentes encargos que van desde portadas de discos, libros y revistas a ilustración de artículos, algún cartel o etiquetas para té. «Voy poco a poco intentando hacerlo todo bien y aprendiendo a cada paso», confiesa.

hoyesarte.com ha hablado con esta joven artista para conocer mejor su trabajo y su forma de ver la ilustración.

¿Qué sensación final busca en su trabajo?

Busco que tenga sentido, que hable de algo. No busco sólo la estética o el estudio de la forma, sino expresar una idea, un momento, una emoción incluso.

¿Cuál es el proceso que hay detrás de uno de sus dibujos?

Antes de coger los lápices siempre hay un tiempo de investigación sobre el tema a tratar y una búsqueda de posibles referencias. Luego dedico una o dos páginas de mi cuaderno a hacer bocetos y buscar la mejor manera de representar lo que quiero hacer. La composición es muy importante. Para terminar, normalmente utilizo dos técnicas. Una es simple, rápida y espontánea, acuarela sobre papel donde previamente he encajado con lápices de color y que finalmente remato con líneas de grafito muy graso. La segunda es donde empiezo a modo tradicional con grafito o lápiz de color sobre papel y luego lo mezclo con color digital en Photoshop, imitando la textura real de la acuarela con pinceles digitales propios. Esta última es la que más uso y la que mejor me representa.

¿Qué hay de usted en sus trabajos?

Mi línea soy yo, es mi carácter y personalidad plasmada en el papel. Además, si le prestas mucha atención a las líneas de cada dibujo te podrán hablar de mi estado de ánimo en el momento que las creé, me delatan irremediablemente. Todos mis dibujos, al fin y al cabo, hablan sobre mí de alguna manera, plasman mi visión del mundo y las emociones que me llevan a hacerlo, aún cuando realizo encargos con temas ya propuestos.

¿Cree que por fin la ilustración ha encontrado un hueco en España?

La verdad es que sí, parece que cada vez se solicita más a los ilustradores y eso me alegra mucho.

¿Hay un boom o no diría tanto?

Sí que pienso que hay un boom. Ahora que la ilustración está en apogeo salen ilustradores de debajo de las piedras.

¿De qué trabajo está más orgullosa?

La ilustración de la cubierta de un pequeño libro del actual Premio Planeta, Lorenzo Silva, y la portada del álbum Familiar Skin, de la banda canadiense Their There.

¿En qué proyectos está trabajando?
Ahora mismo estoy atendiendo varios encargos y ultimando los detalles del diseño de un envoltorio de té.

¿Se puede vivir solo de la ilustración?

La verdad es que aún me resulta muy difícil vivir solamente de esto. Estoy aún comenzando y empezar en este mundo sin tener un «padrino» o ser un «hype» convirtiéndote en una marca es tremendamente complicado. Me ayudan a sobrevivir los constantes encargos de retratos, pero no es lo que realmente me representa.