Más de dos años han tardado en volver a pisar el estudio de grabación los andaluces, pero nuevamente, con la colaboración del escocés Tony Doogan, han vuelto a parir un disco donde se aprecia talento, inspiración y buen hacer. Conocíamos Hasta que sangren y Arena y sal, los dos adelantos del álbum, y ahora, ya con toda la baraja sobre la mesa, temas como Viento de cara, Inestable, Algo que sirva como luz, Furia o El Mañana suponen, por describirlo de forma sencilla, una alegría para el melómano, para el que quizás no lo es tanto y hasta para el que pone la radio por casualidad. Conforman ese tipo de disco que te cambia el día al sonar. Nada más. Nada menos.
«Grabamos el disco con la sensación del que va a un examen y sabe que se lo sabe»
¿Nerviosos con el lanzamiento de Viento de cara? ¿Qué sensaciones tienen?
Pope: Como el disco lleva ya unos días en la calle nos hemos relajado un poquillo al ver la respuesta de la gente. Parece que está gustando bastante, también a los medios de comunicación, y todos los nervios previos a la salida han pasado.
Juanca: Sí, nos hemos liberado un poco. Nos hemos quitado presión.
¿Qué esperan de este tercer trabajo?
José: En ningún momento pensamos “este es el disco que nos tiene que colocar aquí” o algo así. Sabíamos que teníamos buenas canciones y que íbamos a tener tiempo para grabarlas, para experimentar, para indagar en sonido, para crecer como músicos y para plasmar todo lo que habíamos aprendido en los conciertos. Por eso lo afrontamos con la sensación del que va a un examen, sabe que se lo sabe y, además, va a sacar buena nota. Eso nos hizo ir muy relajados y con muy buenas vibraciones al estudio, simplemente a disfrutar. A un músico es una de las cosas más bonitas que le puede pasar. Tampoco nos preguntábamos si íbamos a ser el número uno en ventas, o el dos, ni tampoco el primer grupo de la escena alternativa ni nada de eso.
¿Cuál es el hilo conductor de todas las canciones?
José: Veníamos de Santacruz, un disco más oscuro, más introspectivo también… Y no nos los propusimos, pero sí notamos que todo lo que hacíamos tiraba hacia el otro lado, hacia la otra cara de la moneda: hacia el optimismo, la alegría, las buenas vibraciones en general. Poco a poco vimos que ese era el hilo conductor del álbum por las letras y porque la música que les poníamos también tenían esa tendencia. Nos dimos cuenta de que nos había salido un disco con el viento de cara.
Algunos temas parece que vienen dispuestos a quedarse en la memoria musical española…
Jaime: Bueno, supongo que eso depende de quién lo escuche. Hay personas a las que las canciones les entran antes y otras más tarde.
José: Realmente no teníamos ningún tipo de prejuicio ni patrón. No teníamos nada predeterminado. Simplemente tenemos una canción entre las manos, la trabajamos, la disfrutamos y dejamos que nos conduzca ella misma hacia dónde quiere ir. Se trata de dejarse llevar. Si pensáramos en una serie de objetivos, en si queremos esto o queremos lo otro, creo que no conseguiríamos hacer buenos discos.
¿Alguna canción favorita?
Juanca: Nos pasa a nosotros y también a la gente que está comentando el disco, pero no estamos ante un trabajo en el que gusten el single y otra y en el que el resto sea un poco más de lo mismo. Quizás Viento de Cara sea la que nos ‘ponga’ a todos un poco, pero a mí personalmente me gusta mucho Enemigo yo.
José: Mi favorita es Inestable, ¿por qué? No sé… Me transmite cosas muy chulas, me gusta tocarla, me parece que hemos abierto una senda que no habíamos abordado antes y que sigue manteniendo a la vez la esencia de Supersubmarina. Tampoco hay una razón científica por la que me guste, pero me gusta un montón.
«Somos una banda de amigos que tiene un contrato con una discográfica»
¿Se ha quedado fuera algún tema?
José: Realmente nos comprometimos con la discográfica a hacer 20 canciones, pero cuando ya les habíamos llevado 11 dijeron que eso ya estaba superbien y así se quedó. Nosotros, cuando descartamos temas lo hacemos al principio de todo. Cuando llevamos la idea al estudio y empezamos a trabajar y se nos estanca o no le vemos el color decidimos aparcarla. Unas veces vuelve a resurgir y le damos el color que necesita y otras veces simplemente queda olvidada para siempre.
Se puede decir entonces que Supersubmarina es una apuesta segura. 11 de 11…
Lo tienen claro con nosotros. La verdad es que hasta ahora nos han respetado mucho.
¿Cómo es normalmente el proceso de composición de las canciones?
José: Generalmente yo llevo una melodía con guitarra y entre todos la terminamos. Bueno, en realidad, la canción misma decide lo que quiere ser. Entre todos vamos vistiéndola, dándole nuestra opinión, dejando nuestro sello en ella… Por eso al final es una canción de Supersubmarina, todos le imprimimos nuestro carácter y eso hace que la canción crezca.
¿Cómo sienta eso de que les pongan la etiqueta de indies en grande?
Juanca: La pregunta es qué es un grupo indie. Creo que ahora mismo hay un conflicto precisamente con lo que es un grupo indie, un grupo alternativo, la música comercial, la música independiente… Creo que hay un caos porque a la gente le gusta poner etiquetas. Que te moleste que te tilden de grupo indie o que te afecte es muy relativo. Nosotros lo único que sabemos es que somos una banda de amigos que trabaja y que tiene contrato con una discográfica y que hacen canciones que les gustan para que les gusten también a los demás. Si eso hay gente que lo etiqueta como indie entonces seremos indies, y si otro lo etiqueta de otra manera pues seremos eso también. A veces quieren poner demasiadas etiquetas a los grupos y a las bandas y cuando no se ciñen exclusivamente a lo musical: pop, rock, heavy, jazz… creo que son bastante inservibles.
¿Qué música suelen escuchar?
Jaime: Cada uno escuchamos una cosa, la verdad. En común tenemos, por ejemplo, a Arcade Fire, que nos gustan a todos mucho. También a Black Kids… pero en realidad somos cuatro y escuchamos música que no tiene nada que ver.
Igual que los de otros grupos, sus comienzos fueron complicados… ¿ahora pueden vivir de la música?
José: Sí, nosotros prácticamente desde Santacruz vivimos de ésto y nos dedicamos en cuerpo, mente y alma a la música. Estamos bastante orgullosos de ello porque nos ha costado bastante esfuerzo conseguirlo. Creo que en una época tan difícil ya se puede presumir de trabajar de algo, pero si encima has conseguido tu sueño y el sueño de cuatro amigos creo que es un motivo de satisfacción muy grande poder decir que hoy en día, y desde hace tres años, vivimos de la música.
«Para llenar dos días La Riviera no puedes hacerlo solamente con gente de 18 años»
Y una noche les dicen que está la reina Letizia (entonces princesa) en su concierto…
José: Cuando nos lo dijeron pensamos que se estaban quedando con nosotros. Nos comentaron que quería hacernos una visita y cuando entró pues nos pareció una chavala muy maja, muy simpática y todo muy natural.
En realidad en nuestros conciertos en las primeras filas hay chavalas y chavales de 18 años, pero si te vas hacia las filas de atrás, hacia un ambiente con más aire, digamos, donde la gente disfruta de otra manera de los conciertos, hay gente de 30 años, de 40 o incluso mayores. Defendemos que para llenar dos días la Riviera no puedes hacerlo solamente con gente de 18 años. Tampoco para llenar una sala de mil personas en León. Para lograrlo tienen que ir personas de todas las edades, de todas las condiciones y de todos los gustos musicales.
¿Cómo sienten que han evolucionado desde el primer disco hasta ahora?
Jaime: Somos algo mejores músicos. Tampoco una barbaridad… [se ríe]. Procuramos ir aprendiendo en estos años de recorrido y no solo como músicos: hemos aprendido a desenvolvernos bien en un escenario, a hacer entrevistas… el oficio. Creo que somos personas más completas, por decirlo así.
Eso de “que la inspiración te pille trabajando”, ¿se les puede aplicar?
José: Sí, sí… Lo explico. Si tú estás en un bar comiendo una hamburguesa y te viene la inspiración es muy difícil que sirva de algo aunque lo apuntes en el móvil. Sin embargo, si tú diariamente tomas la música como un oficio, como un artesano, pasas tiempo con tu libreta y tu guitarra, investigas en ideas, en acordes nuevos, escuchas una cosa, escuchas otra, y trabajas en una canción, al final llegarás a hacer temas buenos aunque no se te dé bien porque se trata de eso: de que la inspiración te pille trabajando y de que seas constante.
¿Sería ese el mensaje que le mandarían a alguien que ahora mismo no sepa muy bien qué hacer con su vida?
José: Ese es un mensaje bueno para todos los ámbitos de la vida. El primero que tiene que estar convencido eres tú mismo. Si tú no quieres no vas a poder hacer nada, aunque es verdad que intervienen miles de factores: la suerte, terceras personas o como lo quieras llamar. Lo que es seguro es que tú mismo tienes que estar convencido. En nuestro caso siempre hemos estado seguros de quiénes somos y de lo que queríamos hacer. Luego unos cuantos factores se han puesto en comunión.
Algún deseo cercano…
Jaime: Poder ir a Sudamérica y hacer una gira en condiciones como las que hacemos aquí. Eso sería muy bonito.