El Palau Robert (Barcelona) acogerá desde el próximo 1 de marzo la exposición Jaume de Laiguana. Exposición fotográfica. Retrospectiva 1997-2012, para la que el director de arte, realizador y fotógrafo ha seleccionado 158 fotografías de gran formato que ilustran su particular visión estética y compromiso social. Las fotografías y los vídeos explicativos del proceso de realización de las obras dan a conocer la mirada peculiar y el método de trabajo de este fotógrafo que «no cree en la perfección sino en la belleza de lo que es imperfecto».
La muestra, además, representa un punto y aparte en su trayectoria fotográfica. Con ella se inicia un periodo más alejado de la publicidad, y se acerca a la fotografía más artística y personal, dando así un primer paso en el mundo del arte. «Cada foto –afirma Laiguana– es el final de un camino que termina donde había empezado. Y cada fotografía es empezar de nuevo desde cero. Porque con cada nuevo proyecto empezó un nuevo camino y aprendizaje».
Gran parte de esta obra tiene su origen en la publicidad, pero consigue vida propia. Y es que una de sus principales habilidades es convertir los trabajos por encargo en trabajos de autor, enfocándolos desde su particular punto de vista. Su obra también incluye otros proyectos más sociales cuyo principal objetivo es hacer reflexionar al espectador.