El estudiante pobre Tomás Rodaja marcha a Salamanca a estudiar acompañando a un noble. Allí se licencia con honores y viaja por diversas ciudades de Italia siguiendo inicialmente a un capitán. Más tarde regresa de nuevo a Salamanca, pero pierde la razón a causa de un filtro de amor que le han suministrado en secreto y cree tener el cuerpo de vidrio y ser sumamente frágil. Sin embargo, su agudeza es sorprendente y todos le consultan. Tan famoso llega a ser que es trasladado a la Corte y se convierte en un famoso personaje público.
Dos personajes, Tomás Rodaja y Cervantes, interpretados por José Luis Esteban y Javier Aranda, recrean la picaresca cervantina mezclando con fluidez la situación jocosa con la reflexión.
Dos actores
La adaptación del Teatro del Temple está construida como un “ñaque contemporáneo”, la historia a contar y a personificar a través de dos actores, siendo uno de ellos el conductor de la historia, como alter ego del propio Cervantes y personificador de una serie de figuras que van apareciendo por la historia; y siendo el otro el protagonista de la fábula que a veces arrastra y a veces se ve arrastrado por la misma.
Teatro del Temple ha trabajado en numerosas ocasiones con textos clásicos tanto del Siglo de Oro como del XX. Así han surgido espectáculos como Macbeth & Lady Macbeth o Sonetos de amor y otros delirios, sobre obras de William Shakespeare; y también La vengadora de las mujeres, de Lope de Vega.