¿Qué ocurre cuando se apagan las luces? El mundo de la infancia es también el mundo de las pesadillas. ¿Son ositos de peluche o monstruos? ¿Planetas o canicas? ¿Y quién es ese caballero de brillante armadura: un amigo o un enemigo? ¿Qué ocurre “después de clase”, cuando llega el momento de hacer frente a la noche, de dormir, de adentrarnos en los sueños, abandonado ya nuestro cuerpo?
«Mi interés por los juguetes, payasos y monstruos no remite directamente a la infancia», explica Hammer, «lo que realmente me fascina es la intensidad de los valores que depositamos en estos objetos e imágenes. Una muñeca o un peluche son algo ‘que amamos profundamente’. Adoramos ese juguete y lo maltratamos. Lo abrazamos y lo asesinamos. Al igual que el payaso, inocente y amenazador a la vez, los juguetes son alternativamente víctimas y verdugos. Son malévolos. Se transforman en monstruos cuando se les quiere demasiado. Y, sin embargo, estos monstruos también nos hacen entusiasmarnos y estremecernos: nos encanta la excitación y los escalofríos que nos provoca el temor».
Crypto aborda estos temas (el miedo y la excitación, el amor y la repulsión) con una iconografía sutil y sensible, elegante y provocadora. Las técnicas artesanales utilizadas por el artista, como el trabajo en porcelana o la marquetería con cuero, atraen al espectador y le guían a través de ese pacífico mundo de violencia, refinamiento absoluto y pesadillas.
Lo que subyace bajo la piel del adulto, ya civilizado, es la pérdida de la infancia. Lo que se revela podría ser lo que está, obviamente, oculto y encriptado: la circulación de la sangre, lista para derramarse. La metamorfosis de la vida.