Las colecciones de preludios y fugas, por lo general articulados en parejas siguiendo las 24 tonalidades, se han convertido en un género recurrente en la literatura para tecla, en particular desde los dos monumentales libros de El clave bien temperado de Johann Sebastian Bach, emulados luego por otros muchos compositores.

Este ciclo plantea un recorrido por los repertorios más destacados, pero presentados siempre de un modo insólito: mezclando el timbre de los instrumentos del piano y el clave, en diálogo entre Bach y los autores rusos (Shostakovich, Shchedrín) en transcripción de Mozart para trío o iluminando el Romanticismo.

• Miércoles 29 de octubre

El primer concierto, titulado Mozart reinterpreta a Bach, lo ofrece el Trío Zebra (Ernst Kovacic, violín; Steven Dann, viola; y Anssi Karttunen, violonchelo), con obras de W.A. Mozart (sus Preludios y fugas 1, 2, 3, 4, 5 y 6 para trío KV 404a, basado en El clave bien temperado, de Bach) y Robert Schumann (una selección de Album für die Jugend, con arreglos para trío de cuerda de uno de los integrantes del Trío Zebra, Anssi Karttun, en estreno en España).

En 1782, Mozart escribía a su padre que todos los domingos asistía a casa del barón Van Switen, donde sólo se interpretaba a Händel y Bach. Esta admiración se plasmó en sus Seis preludios y fugas para trío, algunas de las cuales se basan en materiales bachianos y que, en su totalidad, reinterpretan las técnicas compositivas del Barroco. Mozart se alterna con una transcripción para trío del Álbum para la juventud de Schumann, un proyecto que incluye la proyección de pinturas creadas para la ocasión por Muriel von Braun.

• Miércoles 5 de noviembre

El segundo concierto, que lleva por título Teclados en espejo, será interpretado por Claudio Martínez Mehner, piano, y Kennedy Moretti, clave, que ofrecerán una selección de El clave bien temperado. Libro II, de Bach.

En este concierto sonará el mismo repertorio en dos instrumentos con distintas afinaciones (el piano en La=440 Hz y el clave en La=415 Hz) que alternarán sus intervenciones. Pero lo hará de un modo original, con una disposición simétrica e invertida: los preludios y fugas de la primera parte volverán a interpretarse en la segunda, pero en orden inverso y cambiando el instrumento.

• Miércoles 12 de noviembre

El tercer concierto, que lleva por título Barroco soviético, será interpretado por el pianista Miguel Ituarte, con una selección del Libro I de El clave bien temperado, de Bach, y composiciones de Dimitri Shostakovich, Nikplai Kapustin y Rodión Shchedrín.

En 1950, Shostakovich, ya entonces el compositor más destacado de la Unión Soviética, compuso sus 24 preludios y fugas tras viajar a Leipzig. En este concierto, los paralelismos existentes entre las creaciones de Shostakovich y Bach se escucharán en un diálogo al que se sumarán obras de Kapustin y Shchedrín, dos autores soviéticos que prolongan la estela de Shostakovich desde distintas ópticas estéticas.

• Miércoles 19 de noviembre

El cuarto y último concierto, que lleva por título Pervivencias, será interpretado por el pianista Gustavo Díaz-Jerez con obras de Solomon Jadassohn, Karol Szymanowski, César Franck, Joaquín Turina y Maurice Ravel.

Aunque ligada al Barroco, la agrupación preludio-fuga se ha mantenido en numerosas obras posteriores. Este recital explora una constelación de preludios y fugas compuestos en la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX, dando testimonio de la pervivencia y vitalidad que, en un periodo de profunda experimentación musical, conservó esta fórmula.