En esta comedia de Marivaux, la más conocida, se produce una aparente transgresión de las fronteras de clase, que acaba convirtiéndose en un baile de disfraces en el que el verdadero protagonista es el papel de la educación como piedra angular en la construcción de la sociedad moderna.
Toda la obra del dramaturgo refleja principalmente el tema del amor enfrentado a un obstáculo; a la angustia, al vértigo, a la razón, al miedo, al placer que provoca este sentimiento extraño que sus propios protagonistas aún desconocen y que consideran una enfermedad que empieza dentro del corazón y de repente se extiende por todo el cuerpo: lo que llaman ‘sorpresa del amor’, que acaba convirtiéndose en un juego con grandes cuestionamientos personales, de sociedad, de dinero, de poder, de relaciones humanas… y que topa con los prejuicios, las convenciones, las imposiciones y las normas sociales.
Medio siglo antes de la Revolución Francesa, en un momento en que la razón práctica empieza a revolucionar la manera de entender los códigos sociales, los relatos de Marivaux son un canto de celebración a la galantería amorosa que explora los equilibrios entre el arte popular de la Commedia dell’Arte, basada en la improvisación, y la lengua aristocrática de salón propia de la Comédie Française, al tiempo que construye unos laberintos que esconden sombras entre las que laten algunas de las principales tensiones de su época.
Convenciones sociales
Protagonizada por Enric Cambray, Àlex Casanovas, Rubèn de Eguia, Guillem Gefaell, Vicky Luengo, Bernat Quintana y Mar Ulldemolins, la trama gira en torno a Silvia, hija del señor Orgón quien quiere casarla con Dorante, hijo de un viejo amigo. Para juzgar la sinceridad de su futuro esposo, Silvia pide autorización a su padre para hacerse pasar por la criada, Lisette, quien por su parte, se hará pasar por Silvia. Pero Dorante utiliza la misma argucia y se presenta bajo el nombre de Borgoñón, mientras que su criado, Arlequín, suplanta su identidad.
Ambas parejas, la de los falsos criados y la de los falsos amos, protegidos por su disfraz, liberados de sus códigos sociales, se hablarán de amor y vivirán, durante un tiempo, juntos con la libertad, el placer y también el sufrimiento que provocan el conocimiento de la propia verdad y de la propia identidad.
El padre y el hermano de la muchacha serán los únicos que estarán al corriente de este doble juego de disfraces, y seguirán el juego desde la discreción para intervenir puntualmente y facilitar el rumbo de los acontecimientos. Pronto Silvia se siente apática ante su supuesto pretendiente, que muestra unos modales impropios de su clase y educación, a la vez que se sentirá atraída por el supuesto criado. Por parte de Dorante sucederá lo mismo, pero este baile de equívocos solo se resolverá después de que se hayan puesto en crisis todas las convenciones sociales.
- De martes a sábados, a las 20.30 h. Domingos, a las 19.30 h.
- Encuentro con el público: sábado 15 de de noviembre al finalizar la función.