Palacios reflexiona a través de sus esculturas sobre el momento de tránsito de un elemento en transformación, sobre ese instante detenido en el tiempo. El artista parte para ello del estudio del comportamiento de los fluidos, «el estudio de la mecánica de fluidos o el efecto de la gravedad sobre la tensión superficial han supuesto para mí herramientas inspiradoras a la hora de materializar las sensaciones que pretendo transmitir a través de mi obra», explica Palacios.
Según los principios de la mecánica de fluidos, y como parte de la física que se ocupa de predecir el movimiento de estos elementos, se puede llegar a deducir matemáticamente el comportamiento de un fluido en función de su densidad o viscosidad y se puede anticipar cómo se moverá el agua, la miel, la sangre o un elemento que, como el mercurio, tiene una densidad 13,6 veces superior a la del agua.
Así, el artista presenta obras como Mercurio en movimiento, una gran escultura a través de la cual reflexiona sobre el concepto del movimiento en el elemento fluido capturando el momento de tránsito y atracción en el que dos gotas de mercurio se unen en una sola; y otras como Gota fluida o Asimetría convexa.
Ligereza y densidad
Sus trabajos destacan por tener generosas curvas que transmiten un sentido de la rotundidad, un evocador contraste entre ligereza y densidad. Palacios muestra interés por combinar la calidez de las maderas con la frescura de diferentes formas fluidas. Pero en esta nueva muestra el artista habla de formas precisas, de esculpir emociones y conceptos intangibles a través del movimiento, o de la ausencia de él.
Presenta ante el visitante la inspiración y las sensaciones que le producen el modo en el que un elemento pasa de un estado a otro, de la forma transitoria que adquiere una sustancia que, como un fluido, se encuentra en constante cambio, así como de transformaciones, procesos a nivel celular, formas que emanan de la tierra…, elementos todos ellos en tránsito que, al convertirse en escultura, se encuentran detenidos en el tiempo, congelados a través de la abstracción en un instante esculpido.