El concierto, que se celebra este miércoles, 4 de noviembre, ofrece una panorámica de la creación española para orquesta de cuerda del último siglo y medio aproximadamente. La Camerata Capricho Español, bajo la dirección artística de Alejandro Muñoz y la dirección musical de José Luis Temes, protagoniza esta celebración con un recital que se iniciará con el Andante religioso y Andantino expresivo de Jesús de Monasterio (1836-1903), violinista y compositor que contribuyó de manera notable al desarrollo de los géneros “clásicos” en la segunda mitad del siglo XIX.

A una generación posterior pertenece Julio Gómez (1886-1973), músico, musicólogo, crítico musical y docente de profunda erudición, cuya Suite en La (transcripción para orquesta de cuerda de los dos movimientos centrales de su Cuartetino) es un modelo de claridad formal.

Con una carrera truncada por la Guerra Civil, Evaristo Fernández Blanco (1902-1993) forma parte del grupo de creadores que eclosionó en torno a 1927. Obras como la Pequeña suite para cuerdas que se interpretará en este concierto dan testimonio de la originalidad y solidez que caracteriza a las creaciones de este autor.

Tanto Tomás Garrido (1955) como Jorge Fernández Guerra (1952) alcanzaron su madurez compositiva en torno a 1975. El primero, intérprete, compositor, director y recuperador infatigable de músicas de todos los tiempos, es el autor de Cartas ínfimas, en las que dialoga con músicas preexistentes de Luis de Pablo y Francisco Guerrero. El segundo, aclamado en el terreno escénico, compuso su Obertura en verde en 1989 como homenaje al pintor Lucio Muñoz.

Por último, en el concierto verá la luz Connection to Mars, que Raquel Rodríguez (1980) ha compuesto para esta ocasión. Sobre un ritmo repetitivo y enérgico, la compositora pretende reflejar el continuo “hacer y transformar” que ha caracterizado a la Fundación Juan March durante estos sesenta años.