Guillermo Pérez Villalta. Autorretrato por la mañana, 1973.

En 1957 se produjo la culminación en España de diferentes hechos relevantes. En lo político se vivió el final de la autarquía en la dictadura y el inicio del desarrollismo; mientras que en lo artístico surgieron el Equipo 57 y el grupo El Paso. La exposición contiene así un relato por capítulos. Habría que empezar desde la izquierda, con la película que el Equipo 57 realizó ese año, para continuar con AFAL (la Agrupación Fotográfica de Almería), y detenerse al fin en una amplia sala negra mediante cierta visión pesimista, ya fuera desde el informalismo o desde investigaciones formales geométricas.

La abstracción expandida, pospictórica, de borde duro o los modelos, estructuras y formas protagonizan también sendos espacios. Al mismo tiempo, en contraposición, el arte de comportamiento y las prácticas sociales del cuerpo tienen importantes paradas en, entre otros, Bruce Nauman, VALIE EXPORT, Nacho Criado o Marta Minujín. Por último termina el recorrido con el pop político y con las primeras incursiones de la Nueva Figuración.

Si 1957 fue un año muy caracterizado por lo artístico y más difuso en lo político, 1975 es justo lo contrario. Este año fue un punto y aparte por un hecho de clara relevancia política, la muerte del dictador, y un punto y seguido en lo artístico, puesto que fue entonces cuando se inició el declive de los lenguajes abstractos y conceptuales que habían marcado y dominado este periodo, a la vez que comenzó el auge de las tendencias figurativas, que darían un especial protagonismo a artistas andaluces en la llamada Nueva Figuración madrileña.

Tendencias artísticas

En la muestra destaca una pieza de José Ramón Sierra, un gran mural donado por Pepe Soto, que forma parte de un innovador proyecto que este pintor sevillano realizó en los años 70 y que se ha reproducido bajo sus indicaciones, una pieza donada por el artista Juan Suárez y una obra de Soledad Sevilla donada recientemente por el artista Gerardo Delgado, pero también se exponen trabajos de Lucio Muñoz, Néstor Basterretxea, Jordi Teixidor y Rafael Canogar, que hace más de diez años que no han participado en ninguna exposición del CAAC.

La colección está acompañada por documentación relativa, por una parte, a tres galerías fundamentales para la introducción de las últimas tendencias artísticas en la Sevilla de los 60 y 70, como fueron La Pasarela (capitaneada por Enrique Roldán), Juana de Aizpuru (que continúa en activo) y la galería M-11, además de la relativa al Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla, que actualmente está integrado en el CAAC.

Además de este material se incluyen publicaciones y carteles clandestinos procedentes del Archivo Histórico de Comisiones Obreras de Andalucía que contextualizan el momento político y social en que se produjo el arte de estos 18 años.

Rafael Canogar. La escapada, 1971.