Esta iniciativa, que pretende profundizar en el conocimiento y acercamiento a los clásicos desde puestas en escena contemporáneas, culmina en un encuentro con el público, un peculiar diálogo entre espectadores y creadores para festejar el teatro como hecho vivo y cambiante, una oportunidad de ver, compartir y contribuir a la creación escénica junto a los equipos artísticos que la están llevando a cabo.
La apertura de esta edición llega el sábado 21 de la mano de Rosaura, de Teatro Inverso, basada en La vida es sueño, de Calderón de la Barca. Dirigido por Sandra Arpa y Paula Rodríguez, el montaje propone dicho personaje como motor de cambio en la historia, ya que ella lucha contra su propio destino, en contra del orden establecido y los límites que se le imponen. La pieza descubre a Rosaura bajo nuevas luces y desde una perspectiva poética que resuena en el contexto político actual, como metáfora de la necesidad de cambio.
Pero serán los días 27 y 28 de mayo cuando se podrá disfrutar de los cuatro proyectos en proceso de creación incluidos en La Incubadora 2016. Cuatro piezas de veinte minutos de duración que acercan en sus diferentes propuestas a la vida y obra de María Teresa de León, a la locura de amor de Ofelia o a los mecanismos de poder de Coriolano, ambos de Shakespeare, y a una aproximación musical a los textos, sueños y deseos de un joven Cervantes.
De entre las 20 propuestas escénicas presentadas para la cuarta edición de La Incubadora del Corral, cuatro han sido las seleccionadas para participar en este laboratorio de creación artística: María Teresa León Goyri es una autora indispensable de nuestra Edad de Plata. Mujer de teatro auténtica (dramaturga, directora, ensayista, actriz), además de escritora y guionista, es conocida, sin embargo, por haber sido la cometa del astro Rafael Alberti. Lyceum Club recrea su figura para conocer, bajo su personalísima mirada, los cambios sociales y políticos de la España de principios del siglo XX. Tomando como referencia a Hamlet, la pieza reflexiona sobre el suicidio, la evasión, la juventud y su dificultad para exponerse a cualquier tipo de enfrentamiento sentimental, confrontándolo con el compromiso y la entrega de Ofelia. Un suicidio puro. COROlano es una experiencia híbrida, multidisciplinar, donde los ocho intérpretes del montaje contarán con el apoyo de una cinta electroacústica, convirtiendo las palabras de Shakespeare en una gran partitura donde los actores se convertirán en instrumentos musicales humanos. Reflexión sobre los mecanismos retóricos del poder para el control de los levantamientos sociales. Decía Cervantes que donde hay música no puede haber cosa mala. Bajo esa idea, la compañía ha puesto música a algunos de sus poemas y ha compuesto un texto a modo de confesión de sueños y deseos por parte de alguien que, llamándose ya Miguel de Cervantes, todavía no sabía que treinta años más tarde escribiría el Quijote.Programa